La guía de concepts de Top Gear: el Nissan Skyline GT-R de 2001

El espíritu del Nissan GT-R actual nació con este estilizado ejercicio de diseño.

El Nissan GT-R se ha convertido un emblema de la máxima tecnología enfocada para ser rápido, efectivo y brutal. En su momento cambió las reglas del juego, conseguir tanta tracción para ser más rápido que otros coches más potentes y más ligeros. Parece imposible pero el GT-R, como diría James May, montó bajo su esbelta carrocería un auténtico arsenal de tecnología, el resultado de años de aritmética que se te muestran frente a ti cada vez que hundes en la moqueta el pedal derecho.

Cada vez más parecido: Nissan GT-R Nismo 2017, el renovado pináculo de la efectividad

El Nissan Skyline GT-R que se presentó en el año 2001, seis años antes de la llegada al mercado del Nissan GT-R, adelantaba las formas y la línea estética que debía lucir el sucesor del Skyline más potente y salvaje. Este prototipo era un simple ejercicio de estilo, como una especie de mapa para dejar sobre la mesa el futuro deportivo de la marca con el que plantar cara a vacas sagradas del sector como el Porsche 911 o el Ferrari V8 de la época.

No contaba con motor, por lo que no anticipaba el torrente de prestaciones que finalmente el GT-R iba a tener. El objetivo de este prototipo era llevar las siglas GT-R, las más famosas de la marca y que portaron las versiones más salvajes del Nissan Skyline, al siglo XXI, mostrar como podía ser el mito en el mundo moderno. Aunque el modelo de calle tardó seis años en llegar, la estética está claramente inspirada en este concept, especialmente si observas la foto cenital que puedes ver en la galería.

Curiosamente, aunque el coche no contaba con motor ni con transmisión ni con prácticamente nada que le permitiese ser conducido, sí lo podías hacer en un mundo virtual, algo tremendamente de moda a día de hoy: el Nissan Skyline GT-R concept estaba disponible como coche virtual en el Gran Turismo 4.

En las imágenes puedes ver los muchos parecidos que este prototipo del Nissan GT-R guarda con la versión de producción. En su momento este concept sorprendió por su tamaño, bastante generoso, como si se tratase casi de un gran turismo. El frontal guarda muchos parecidos, especialmente en lo que a colocación de elementos se refiere. La línea lateral, limpia y contundente, también se mantuvo en el modelo de producción y esta línea desembocaba en cuatro faros redondos, que obviamente, también se mantuvieron en la versión de calle como un elemento estético casi obligatorio en un Skyline.

Te interesa: otro concept car más que interesante: el espectacular Porsche Panamericana

Lo mejor de todo es que vemos este concept a día de hoy, con todo lo que ha llovido, y no luce desfasado. Su estética es limpia y sincera, implícitamente deportiva. Tal como se mostró al mundo en el Salón de Tokyo. En el interior los cambios con el Nissan GT-R de calle son totales. Se optó por una consola flotante minimalista y orientada hacia el conductor que pudo inspirar a los diseñadores de McLaren. Quizás lo más interesante del interior sea el volante, ¿no os recuerda a nada? Sí, es prácticamente el mismo que el del Nissan 350Z presentado a finales de 2002.

El Nissan GT-R actual se acaba de actualizar, y con su nuevo frontal y sus tomas de aire laterales más estrechas, todavía se parece más al prototipo del Nissan GT-R original. Si un diseño sigue vigente 15 años después de su presentación deja patente que el trabajo fue realmente bueno. En un futuro los cambios que se avecinan son tremendos en la gama GT-R, con un modelo, el R36, completamente nuevo y con tecnología híbrida. Veremos si Nissan vuelve a sorprender con un prototipo tan interesante como este para mostrar por donde irá el futuro de su gama más emocionante.

Etiquetas: Concept Cars