Nuevo Rolls Royce Cullinan: ¡ese será su nombre comercial!

Rolls-Royce Cullinan
El coche más grande del año, cada día está más cerca.

El nuevo Rolls-Royce Cullinan está en su última fase de desarrollo y hoy ya conocemos, de manera oficial, que ese será finalmente el nombre comercial del gigantón de Goodwood. Oh, vaya, ¡qué sorpresa! La verdad es que no, ya que desde el primer momento Rolls-Royce bautizó este proyecto con el nombre del diamante más grande jamás encontrado, una bestia de 3.106 quilates. La verdad es que no sería de extrañar que el peso final del coche fuera similar, aunque en quilos, obviamente.

El Rolls-Royce Cullinan va a llegar a finales de 2018 con varias efemérides que destrozar. Será el coche más grande del año, probablemente el más pesado y, sin lugar a dudas, se colocará como el todoterreno más lujoso del planeta. También podría convertirse en el más caro y en uno de los más potentes, gracias al gigantesco motor V12 que debería rondar los 600 CV. Eso sí, el nuevo Cullinan no será uno de los SUV más rápidos: ¿a quién le interesa ir a una drag race con un Rolls-Royce?

Y es que el objetivo de la marca es que este mastodonte mantenga, al pie de la letra, todas las claves que se esperan en un Rolls-Royce. Tendrá toneladas de las mejores maderas, cueros y materiales en general. Será tecnológicamente muy avanzado, con muchos elementos heredados directamente del Rolls-Royce Phantom 2018. Aunque ya te adelanto que lo más interesante derivado del nuevo buque insignia de la marca no será precisamente la pantalla interior.

Nuevo Rolls-Royce Cullinan: un auténtico Rolls

¡Será el chasis! El nuevo Rolls-Royce Cullinan será el segundo modelo de la marca en equipar la nueva plataforma de Rolls-Royce, completamente fabricada en aluminio y con una mayor rigidez torsional. El objetivo es reducir el peso, mejorar los consumos y mejorar su comportamiento dinámico: no obstante, hablar de curvas con este coche es como hacerlo con el Mercedes-AMG G63 2018. ¡Un despropósito! Esta nueva plataforma es un 30% más rígida que la anterior, con suspensión independiente de doble horquilla en el eje delantero y un eje multibrazo en el trasero. Contará con cuatro ruedas directrices y por supuesto mantendrá una suspensión neumática autoregulable que hará que esta bestia siga siendo una auténtica alfombra voladora, como cualquier otro Rolls-Royce.

¿Sigues sin ver claro un SUV de Rolls-Royce? En la marca se esconden en una teoría no sé si muy válida: afirman que los primeros Rolls-Royce ya tenían esta vocación aventurera. “Cuando nació la marca, los coches tenían una gran distancia al suelo y neumáticos enormes. Se utilizaban principalmente por Maharajas y otros personajes para viajar entre Europa hacia el lejano oriente.” Comentaba Adrian van Hooydonk, jefe de diseño de BMW. Bueno, bueno, bueno. Ya, ¡claro! No vivimos en 1920, aunque en algunas cosas debo decir que este mundo del automóvil del lujo era más apasionante.

“Los diseñadores, ingenieros y artesanos de Rolls-Royce han desarrollado, probado y mejorado este concepto único para eliminar cualquier posible debilidad, en cualquier lugar.” El coche la verdad es que ha sido probado a fondo en algunas de las situaciones más complejas, desde los ardientes desiertos africanos hasta el Círculo Polar Ártico, de las Tierras Altas en Escocia al Gran Cañón del Colorado. El concepto es interesante: crear el coche más lujoso del mundo y hacerlo, de paso, también más versátil y capaz en cualquier territorio.

Nuevo Rolls-Royce Cullinan: rivales de peso

Y es que el nuevo Rolls-Royce Cullinan no pretende ser un gran todoterreno fuera del asfalto, pero sí quiere dotar a sus clientes de la posibilidad de tener un coche más versátil por si en algún momento alguien decide ir a cazar gansos con su Rolls-Royce. Sin lugar a dudas la competencia será muy dura, con coches como el Bentley Bentayga, el Mercedes Clase G o el futuro BMW X7, primo lejano de este Cullinan. Los SUV de lujo van a dar un cambio importante cuando, más allá de estos modelos que apuestan por el clasicismo, terminen de llegar la oleada de SUV superdeportivos como el Lamborghini Urus, el futuro SUV de Aston Martin y el modelo con el que Ferrari quiere sorprender al mundo.

Y es que parece claro que la versatilidad se va a convertir en otro elemento importante dentro del lujo. El Rolls-Royce Cullinan no será amado por todos pero parece claro que va a seguir siendo un auténtico Rolls-Royce, con todo lo bueno que ello conlleva. Quizás la mayor duda, a día de hoy, es el apartado estético: es difícil que este camión de lujo pueda ser tan bonito y elegante como el Rolls-Royce Phantom o modelos tan alucinantes estéticamente como el Rolls-Royce Dawn. ¡Ojalá en el Salón de Ginebra 2018 nos puedan dar algún que otro adelanto! Aunque mucho me temo que no será hasta finales de año cuando salgamos definitivamente de dudas: incluyendo el dato más esperado, el del precio del Rolls-Royce Cullinan, que algunos apuntan a que podría rondar los 400.000 euros. ¡Excesivo en todos los sentidos, como el diamante Cullinan!

Etiquetas: SUV, Superlujo