La verdad es que los coches de Lady Gaga nos han sorprendido por su sencillez. No, no es una broma. Resulta que la extravagante cantante disfruta al volante de vehículos clásicos, bastante normalitos para lo que es ella. No obstante, también guarda en su garaje algunos de lujo para aquellos momentos en los que la sale la vena superstar. Además, tampoco se ha olvidado de algunos deportivos al nivel, por ejemplo, de los coches de Fernando Alonso.

Viendo las excentricidades estéticas de Stefani Joanne Angelina Germanotta -nombre real de la intérprete-, nos temíamos lo peor sobre sus gustos de cuatro ruedas. Nuestros miedos eran fundados recordando aquel vestido confeccionado con carne natural y con el acudió a la gala de los MTV 2010. O de los bañadores que empleaba en su primera etapa como uniforme diario. 

Con esos antecedentes habría sido lógico que los coches de Lady Gaga fueran cualquier cosa menos convencionales. Pues nada de eso. Porque para el día a día es una amante de las piezas -motorizadas- antiguas.

Tanto es así que ha posado con algunos modelos bastantes sencillos...si los comparamos con las peculiaridades de su propietaria. Entre la fauna vintage destaca un Chevrolet El Camino, cuya adquisición coincidió con uno de los múltiples cambios de look de la famosa y poliédrica señorita. 

También un Ford Bronco que no es nada del otro mundo y con el que se la ha visto por las calles de Malibú, puesto que reside a ratos en Los Ángeles, además de en Nueva York y en otros lugares.

Tampoco resulta extraño encontrársela por las carreteras de Santa Mónica sentada en un Chevelle SS, similar al que aparecía en una de las entregas de Fast and Furious, una de las mejores pelis de coches. Sin duda es otro de los vehículos que más la atraen.

En su momento, nos mostró en la redes un enorme Lincoln Continental del 65 convertible junto al que se fotografió con indumentaria de señorita pin-up, muy recatada y tapadita. De verdad, mira las fotos. 

Dejando al margen las joyas americanas, también hay espacio para algunos ejemplares europeos bastante interesantes, sobre todo, deportivos. Tanto es así que la mola darse un paseo por Bel-Air con sus Audi R8 y McLaren MP4-12C Spider, del estilo al que condujo Fernando Alonso por California. 

Por último, y para esos días en los que levantado en plan estrella del pop, emplea algunos Rolls-Royce. En los últimos tiempos se ha dejado ver en un par de exclusivísimos Rolls-Royce Phantom sucesores de un Corniche III del 90. Con este último, descapotable,  la gustaba dar la nota, y no la musical precisamente. Posee una fortuna aproximada de 280 millones de dólares y claro, no se va a sentar en cualquier trasto.

Ah, casi se nos olvida comentarte que Lady Gaga comparte afición por los coches con Beyoncé. Ya se sabe que Dios los crea y ellas solas se juntan.

No te olvides de pasarte por nuestra galería para conocer más detalles de los coches de Lady Gaga . Te van a encantar.