Si existe una marca que tenga pocas cosas que demostrar en este momento, es la dirigida por Elon Musk -sí, el mismo que quiere llevarte a más de 1.000 por hora en su Hyperloop-. No sólo ha logrado callar unas cuantas bocas al lanzar al mercado unos cuantos automóviles eléctricos muy interesantes, sino que ha conseguido hacer saltar disparadas varias cejas al construir el coche de producción más rápido del mundo: el Model S P100 D. Hoy te traigo una prueba más de que la diversión no siempre tiene que ir disociada de la movilidad eficiente: un Tesla haciendo trompos en la nieve a toda velocidad. 

Vale, puede que creas que al protagonista del vídeo le faltan un par de veranos, pero seguro que estarías mintiendo si afirmaras que nunca has practicado un poco cómo conducir en la nieve como un auténtico piloto en algún aparcamiento solitario tras un temporal. Y no te culpo por ello: además de divertido puede servir para aprender a anticiparte a las reacciones de tu coche en una situación de riesgo. Pero volvamos a lo que importa: un Tesla haciendo trompos en la nieve a toda como si no hubiera un mañana... que termina con mejor resultado que este S5 que se zampa una marquesina de autobús al intentar imitar a Ken Block -¿has visto todas sus gymkhanas?-. 

¿Qué te ha parecido? Es posible que no sea en este tipo de maniobras en lo primero que pienses al valorar la compra de un automóvil eléctrico -aquí unos cuantos coches híbridos para 2017 que no te harán llorar de pena-, pero saber que podrías pasar ratos así de buenos siempre tranquiliza, ¿no? Te dejo viendo el vídeo del Tesla haciendo trompos en la nieve. Voy a ver si puedo acercarme a un concesionario de la marca ahora que van a empezar a vender en España. ¡Nos vemos!