Mini Electric Concept: la movilidad del futuro en Frankfurt

Hoy lo ves como prototipo, mañana te lo encontrarás a la vuelta de la esquina.

Parece evidente que si hay algún tipo de vehículo que sufrirá la revolución eléctrica con más fuerza que ningún otro serán los coches urbanos: ¿has visto el primer Smart eléctrico y autónomo?. El Mini Electric Concept es el prototipo con el que la marca británica y el Grupo BMW muestran cómo ven el futuro eléctrico de este icónico modelo: eficiente al máximo, muy tecnológico pero sin perder de vista en ningún momento el componente lúdico y divertido de un Mini. ¡Será una de las grandes novedades del Salón de Frankfut 2017!

Te interesa: 5 cosas que necesitan los coches eléctricos para ser un éxito

“Con su característica sensación de kart y su potente motor eléctrico, el MINI Electric Concept resulta muy divertido de conducir al tiempo que es completamente adecuado para el uso diario y no produce emisiones. Así es como concebimos en MINI la movilidad eléctrica del mañana”, afirmó Peter Schwarzenbauer, miembro del Consejo de Administración de BMW, responsable de MINI.

Así es el Mini más deportivo

Sin duda, el Mini Electric Concept avanza el camino para el futuro Mini -aquí la prueba del modelo 2018-, un coche que llegará más pronto que tarde y que lo hará combinando eficiencia y diversión. La marca ha cuidado mucho parámetros como la aerodinámica o el diseño ligero, que ya no solo ayudan a una experiencia al volante más eficaz sino que también mejoran la autonomía eléctrica, antes de la llegada de las baterías del futuro. La nueva parrilla frontal, con los nuevos faros delanteros, hace que esta versión eléctrica sea fácilmente reconocible. En la marca quieren que este coche tenga su propia identidad y la rejilla delantera completamente cerrada, para mejorar la aerodinámica, es un buen ejemplo.

El color de contraste elegido en el Mini Electric Concept es el amarillo ‘Striking Yellow’, que se podría convertir en el color corporativo de los Mini eléctricos. La superficie del vehículo está compuesta por superficies estiradas y de corte limpio que producen una impresión minimalista que rebosa eficiencia: la pintura Reflection Silver, con acabado metal líquido mate, intensifica todavía más esta sensación y le otorga a las superficies un efecto excepcional.

Otra de las novedades es la construcción con tecnología de impresión 3D en varios detalles como las inserciones aerodinámicas del coche, una tecnología que parece claro que se irá incorporando en la fabricación de automóviles por su gran versatilidad y bajo coste. La zaga también tiene un marcado espíritu Mini, con una posición muy ancha y deportiva. Los pilotos traseros denotan el marcado carácter británico del modelo, ya que ambos representan la mitad de la bandera Union Jack. 

Sin duda el Mini Electric Concept es un prototipo vanguardista que nos muestra hacia dónde irá el Mini del futuro: divertido, eficiente y con una imagen que seguirá siendo un icono con el paso de los años. El primer Mini eléctrico de la historia llegará en el año 2019 y viendo por dónde van a ir los tiros, tiene muchas posibilidades de que sea todo un triunfo.