El paso está dado: la revolución eléctrica de Volvo promete ser realmente importante y decidida, apostando todo a la electricidad para ofrecer prestaciones, con su nueva gama Polestar, que estará formada por coches eléctricos, y eficiencia. Así lo ha afirmado Hakan Samuelson, presidente y director ejecutivo de la compañía: “nuestros clientes piden cada vez más vehículos eléctricos y queremos responder a sus necesidades actuales y futuras. Ahora es posible elegir el Volvo eléctrico que se desee.” 

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Para satisfacer esta demanda, Volvo lanzará una auténtica ofensiva eléctrica que afectará a toda su gama, Volvo S60, Volvo S90, Volvo XC40 2018 (se las tendrá que ver con modelos como el nuevo Hyundai Kona eléctrico)... : todos los Volvo del futuro contarán con motor eléctrico, tanto con opciones híbridas enchufables asociadas a motores de gasolina y diésel, como a vehículos 100% eléctricos: el responsable de la marca sueca ha afirmado que entre 2019 y 2021 lanzarán cinco nuevos coches eléctricos de Volvo, dos de los cuales se englobarán en la nueva marca Polestar.

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Pero la importancia en esta materia va más allá: el grueso de las ventas será ocupado por los híbridos de Volvo, tanto es así que la marca mantiene sin fisuras su apuesta. ¡Quieren vender un millón de coches eléctricos antes del año 2025! Este anuncio también implica otras mejoras en el apartado medioambiental, como la optimización de sus plantas de producción: el objetivo es que en 2025 sus procesos de fabricación no tengan ningún impacto en el clima.

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Volvo quiere plantar cara a Tesla y a otra empresas que apostaron mucho antes por la electrificación, como Toyota. La verdad es que los híbridos enchufables son una opción realmente interesante, tal como pude comprobar en la prueba del BMW 330e y no tengo ninguna duda que marcarán el futuro en el corto y medio plazo. ¡La electricidad no tiene por qué ser siempre mala!