Hoy es un día triste: este es el último Rolls-Royce Phantom VII

¡Hasta siempre comandante del lujo!

Este es el último Rolls-Royce Phantom de la actual generación. El último buque de superlujo de Rolls-Royce antes de la llegada del Rolls-Royce Phantom 2018, la octava generación, que debería hacer acto de aparición el año que viene. Hoy es un día triste, el Rolls-Royce Phantom VII llegó en el año 2003 y durante todos estos años ha terminado por conquistar nuestro corazón como uno de los coches más lujosos del mundo, por no decir el que más.

Motivo de celebración: Rolls-Royce Phantom Zenith Collection

El último Rolls-Royce Phantom VII en abandonar la cadena de producción artesanal en Goodwood no te va a dejar indiferente. Se trata de una versión con carrocería larga, creada de manera especial para uno de los coleccionistas más importantes de Rolls-Royce. Esta pintado en color negro y con las llantas de 9 radios en terminado antracita y los neumáticos pintados le dan ese sabor tan opulento y de lujo clásico que solamente el Rolls-Royce Phantom puede aportar. 

En el interior, el último Rolls-Royce Phantom te traslada a otra época, aquellos años 30 de lujo exuberante y ‘Art Decó’. El trabajo artesanal en el interior es abrumador, especialmente en lo que a madera y ebanistería se refiere, con numerosos detalles como la proa de un barco transatlántico en el salpicadero. Todo está terminado con mimo y el cuero también muestra motivos ondulados. Hay que decir que al ser el último Rolls-Royce Phantom se podría considerar como el mejor, cuenta con todos los elementos que han ido incorporando a la gama durante todos estos años: techo estrellado, las últimas técnicas de tapicería o las plazas traseras completamente cerradas por un marco que las separa de las plazas delanteras. Espectacular.

La madera del último Phantom evoca la era de los grandes viajes, tanto en barco como en otros medios de transporte. El reloj del salpicadero también evoca a aquellos tiempos. Todo en este coche sabe especial y por mucho que lo intenten, el Rolls-Royce Wraith o el Ghost jamás podrán alcanzar la excelencia y la elegancia clásica del Phantom.

Pero bueno, aunque es difícil mejorar a esta generación del Phantom, Rolls-Royce intentará hacerlo basándose en una nueva plataforma de aluminio, que seguirá enfatizando un confort de otro planeta y una calidad de rodadura excepcional. En el interior, dudo que haya grandes cambios: seguirá teniendo cuero, seguirá teniendo madera y nos seguirá dejando con la boca abierta. Seguro. Para terminar esta noticia, qué mejor que conocer la historia de todos los Rolls-Royce Phantom. ¡Una saga de éxito!