Los cinco mejores Grupo B de la Historia

Si no has suspirado, no te molestes en seguir leyendo: esto no es para ti.

Ya te hemos hablado de estos espectaculares coches de rally en muchas ocasiones, sabiendo, además, que si eres un aficionado a esta disciplina, los conocerás de sobra. Te hemos contado que tienen su película, que algunos de ellos (como el de Ari Vatanen) han salido a subasta. Pero no nos habíamos puesto a elegir los cinco mejores Grupo B de la Historia. Ya era hora de que lo hiciéramos, ¿no? Sin dramas y sin insistir en su leyenda de malditos. Para eso ya está tu cuñado… si es que ha oído algo sobre ellos.

Peugeot 205 T16

Los mejores Grupo B de la Historia: Peugeot 205 T16 (II)

Empezamos por el que quizá es más recordado, el más potente y radical de todo el lote, el mítico Peugeot 205 T16. Presumía de las mejores características de los dos Grupo B punteros de aquella época, el Lancia 037 (del que tomó el motor central y la carrocería de fibra) y el Audi Quattro (de aquí sacó la idea del turbo y la tracción total). Así se logró una bestia que pasó de los 300 CV iniciales a 500, para un peso de 910 kg.

Lancia Delta S4

Los mejores Grupo B de la Historia: Lancia Delta S4 (II)

Propulsor central con turbo, chasis tubular, carrocería de fibra, tracción a las cuatro ruedas… Y Henri Toivonen a sus mandos. Ya sabes cómo acaba esto. Tenía 450 CV y era poderoso, mucho. Todo petrolhead lo quiere en su garaje soñado.

Lancia 037

Los mejores Grupo B de la Historia: Lancia 037 (II)

El antecesor del Delta S4 se llevó el Mundial de Rallys de 1983 gracias a Walter Rohrl y Markku Alen; un año después, cambió su motor 2.0 por otro ligeramente mayor y llegó a los 325 CV. Sin embargo, su propulsión trasera no pudo hacer nada contra los Audi y Peugeot, ambos 4x4, y fue imposible revalidar el título.

Ford RS 200

Los mejores Grupo B de la Historia: Ford RS 200 (II)

Resultó revolucionario cuando se creó, debido a su carrocería en acero, kevlar y fibra de carbono, unos materiales poco vistos en la década de los 80. El turbo permitió extraer de su motor hasta 450 CV.

Audi Quattro A1

Los mejores Grupo B de la Historia: Audi Quattro A1(II)

Su tracción integral trajo una auténtica revolución al mundo de los rallys. Sus 4,4 metros de longitud lo convertían en un vehículo grande, pero apenas pesaba 1.000 kg. Y su mecánica ofrecía 370 CV.