Éste es el Ford Fiesta WRC que va a llevar Sebastien Ogier

El Ford Fiesta de M-Sport tiene una pinta acoj*****e. Ogier va a conducirlo.

Acaba de presentarse el Ford Fiesta WRC 2017. Justo cuando acabábamos de conocer la versión de calle. Aunque el de competición se beneficia de las nuevas normas que regirán en el Mundial de Rallys el año que viene y que ya te hemos explicado aquí. Para resumir, tiene pinta de estar cabreadísimo. Y eso nos gusta.

Está claro que M-Sport, la formación encargada de poner a punto el vehículo y de hacerlo participar en el certamen, posó sus manos sobre el nuevo Fiesta muy pronto y realizó bien su trabajo.

El coche ha sido creado casi desde cero y comparte muy poco con el Fiesta WRC al que sustituye. Lo más evidente es su carrocería excesiva, con alerones por todas partes: el enorme spoiler trasero, los apéndices delanteros y la demás parafernalia se combinan para dar una idea de su eficacia aerodinámica. Por no hablar del difusor posterior, que parece capaz de arar un campo.

¿Su potencia? Hay mucha, gracias a un motor 1.6 que adopta la etiqueta Ecoboost (ya sabes cómo va esto: ‘gana el domingo, véndelo el lunes’, dice la máxima) y aumenta su fuerza hasta los 385 CV. Según M-Sport, “tienes que oír cómo suena para creértelo”. Vamos, que hace ruido. Por fin.

Una caja de cambios hidráulica secuencial de seis velocidades ayuda a mandar esa potencia a las cuatro ruedas, mientras que la suspensión tiene la suficiente capacidad de ajuste para adaptar el Fiesta WRC a los diferentes terrenos que habrá de afrontar en el Mundial de Rallys 2017.

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La seguridad también se ha incrementado, gracias a un 50% más de ‘espumas para la absorción de impactos’ y a unas barras antivuelco de acero que ayudarán a proteger a sus ocupantes. Hablando de ellos, Sebastien Ogier (el actual y cuatro veces campeón del mundo con VW) acaba de ser confirmado como uno de los pilotos de M-Sport. Probó el Fiesta hace poco y también el Toyota Yaris WRC… y ha acabado en la marca del óvalo azul.

En palabras de Malcolm Wilson, director de la formación, “empezamos la temporada 2017 con un objetivo en mente: regresar a lo más alto del podio”. Vale, tiene a Ogier, pero el francés está acostumbrado a contar con el mejor coche. Y es justo lo que va a exigirle al bueno de Malcolm. Se avecinan tiempos apasionantes…

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