Una cosa es ser un fan de la Fórmula 1 y querer ver de cerca a tus ídolos pilotando sus bólidos, y otra muy distinta es actuar como el descerebrado del vídeo. ¿Qué se pasó por la cabeza a ese elemento para actuar así?

Resulta que Red Bull F1 organizó una exhibición en Chiba (Japón) con uno de sus monoplazas. La multitud disfrutaba con los trompos de Sebastian Buemi cuando éste vio cómo un espontáneo venía corriendo por el lado derecho de su máquina. ¿Quéeee? Pues ni más ni menos, vio como el loco ese intentaba saltar por encima del coche que rodaba en ese momento por un tramo recto de la pista. Con un par.

Como es natural, la 'proeza' terminó en un tremendo porrazo que se pegó el pirao este. Y la cosa podía haber sido mucho peor si el bólido hubiera rodado más deprisa de los 20 km/h que alcanzaba en ese momento de la prueba.

Afortunadamente, no hubo que lamentar ninguna desgracia. El descerebrado se llevó un buen revolcón y posteriormente un severo rapapolvo de los organizadores, mientras que Buemi resultó ileso.

Al colega este le recomendamos que no interrumpa su tratamiento farmacológico porque luego pasa lo que pasa. Ah, y también habría que decirle que deje el sake, muy popular en su país.