Comparativa Honda Civic Type R: el más querido contra el más potente

El nieto contra su abuelo...

¿Qué tenemos aquí?

¿Has visto ya el nuevo Honda Civic Type R Prototype para 2017?

Se trata de una comparativa entre dos capítulos distintos de una de las mejores historias que existen en el mercado del automóvil: el Honda Civic Type R. Hemos decidido enfrentar al modelo más querido por el gran público -lanzado en 2001 y conocido como EP3- contra el más potente jamás fabricado por el constructor nipón de vehículos: el modelo 2016. 

Háblame del antiguo

El Honda Civic Type R del año 2001, conocido internamente como EP3, es uno de los compactos más juguetones que podías comprar a principios del milenio, con una relación precio/prestaciones/diversión difícil de igualar. ¿No me crees? Tenía un bloque de dos litros atmosférico y 200 CV capaz de acelerar de 0 a 100 en 6,4 segundos. Y de hacerte sonreír en sólo dos. 

¿Y qué hay del nuevo? 

El Honda Civic Type R 2016 es un auténtico instrumento de destrozar cronómetros en el circuito, gracias en buena parte a su poderoso bloque de dos litros turboalimentado capaz de entregarte 310 CV y acelerar hasta los 100 km/h en 5,7 segundos si es que eres capaz de exprimirlo en condiciones. Sí, su estética no pasa nada desapercibida pero déjame decirte algo: cada añadido aerodinámico cumple una función concreta y nada está por estar...

Muy bien, pues parece que el nuevo gana por goleada, ¿no?

No tan rápido: con las cifras en la mano, está claro que los años no pasan en balde y el proceso de evolución entre un modelo y otro es bastante tangible. Pero cuando realizas una compra tan irracional como la que podrías estar planteándote si buscas un coche como el Honda Civic Type R existen otros factores que entran en juego, y además con bastante peso: las sensaciones. 

Ajá, ¿y...?

Pues que cuando se trata de intentar dibujar una sonrisa en tu cara, el EP3 es el modelo que mejor sabe hacerlo: su motor es putiagudo, potente, progresivo y con una patadita cuando su distribución variable VTEC empieza a darlo todo que te harán querer ir más y más rápido. Entre curvas se trata de un coche noble, fácil de llevar por el sitio y con un eje trasero que ayuda mucho a redondear las trazadas cuando ahuecas un poco el acelerador en apoyo. 

El Honda Civic Type R 2016 es, en cambio, una herramienta tremendamente efectiva en los menesteres relativos a recorrer distancias en el menor tiempo posible, y en su efectividad está su talón de Aquiles: va tan bien, que juguetear con él te resultará más difícil... y peligroso. Donde antes el límite era razonable y asequible al conductor quemado medio, ahora se encuentra en unas cotas tan elevadas que un error puede convertirte en un sello incrustado en el asfalto de tu circuito preferido. Si sabes lo que haces, podrás darle más de una colleja a muchos deportivos con mayor potencia y pedigrí. Si no... cómprate un Fiat Multipla. 

¿Veredicto? 

Desde luego, el primer Honda Civic Type R que se vendió en el mercado europeo -antes que él existió otro denominado EK9 que sólo pudo adquirirse en Japón- tiene bien merecida su excelente fama entre los aficionados a los hot hatchbacks, mientras que el recién llegado ha demostrado poder ser más rápido que muchos otros vehículos de mayor categoría. 

No te pierdas: Todas las generaciones del Honda Civic Type R

La pregunta es clara: ¿prestaciones o sensaciones? Si buscas lo primero, lánzate a por el modelo 2016. Si quieres de lo segundo, ármate de paciencia y busca uno de los años 2001 al 2005... y que la suerte te acompañe. Me apuesto contigo lo que quieras a que encuentras más de uno que sólo se usó para ir a comprar el periódico los domingos. Con barra de torretas y volante desplazado. 

Texto: Jack Rix

Nuestro veredicto

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