Prueba: Audi S3 Sportback, el hermano gemelo del Golf R

Todo queda en familia...

¿Prueba del nuevo Audi S3 Sportback?¿No acaba de presentarse? 

No, querido amigo o amiga: quizá te estés confundiendo con el Audi RS3 Sedan 2017 que se presentó en el pasado Salón de París 2016, con su bloque 2,5 litros, sus 400 CV y su tracción integral. 

Oh, vaya... 

Tampoco vayas a creer que el que estamos probando hoy es su versión más descafeinada: el nuevo Audi S3 2016 ha estrenado una nueva imagen -bueno, ha redefinido un poquito la anterior- y ahora incorpora un bloque TFSI de dos litros y 310 CV asociado a una caja de cambios S Tronic de siete relaciones que... 

Espera, espera: ¿310 CV?¿Los mismos que el Golf R?

Correcto. El Volkswagen Golf R 2017 estará animado por el mismo propulsor que equipa el Audi que tenemos hoy entre manos, así que ambos coches serán prácticamente iguales... y tendrán el mismo objetivo: ofrecer la mayor diversión posible siendo dos de los principales rivales del SEAT León Cupra 2017. Que en esta nueva generación tendrá 300 CV y en su versión ST podrá montar tracción integral. 

Suena bien. Cuéntame más del Audi.

El modelo que estás viendo en las imágenes de esta prueba del nuevo Audi S3 Sportback es la renovación del compacto más célebre de la firma de cara a estirar un poco más la vida de esta generación estrenada en 2013. Lo han hecho a través de un frontal rediseñado y sobre todo con unos grupos ópticos LED cuyos intermitentes no son... intermitentes. Ahora actúan a través de un conjunto de luces que simulan una barra de carga. Como la luz delantera de El coche fantástico -que podría volver en 2017-

Sigue siendo soso... 

Una vez más: correcto. El punto fuerte del S3 nunca ha sido una imagen estridente, y este modelo 2016 no es una excepción. Pero piénsalo de otro modo: si le retiras los logotipos que lo identifican como lo que es, quizá puedas dejar a más de un piloto venido arriba con su Honda Civic Type R pasmado. Como cuando ves a una liebre en la carretera y le das las largas. 

Buen punto. ¿Es más rápido ahora?

Sí, pero no vas a notar un gran salto hacia adelante. Gracias a un motor de dos litros TFSI con 310 CV y 400 Nm de par máximo, la unidad de nuestra prueba del Audi S3 Sportback 2016 es capaz de alcanzar una velocidad punta de 250 km/h -limitada- y de completar el 0 a 100 en 4,6 segundos, lo cual es muy bueno. Pero gracias -o por culpa de, según quieras mirarlo- a una caja de cambios S Tronic asociada a una tracción Quattro realmente precisa e infatigable, ningún caballo parece nunca fuera de sitio en el hot hatchback alemán... salvo que haya mucha agua, hielo o seas tan torpe que nadie debería dejarte cruzar la calle sin supervisión de un adulto. 

Pero nunca llegará al nivel de un RS... 

Prueba del Audi S4 Avant 2016: ahora, un poco menos RS

Mmmm, es complicado. Evidentemente, con las cifras en la mano los 90 CV extra que regalará el modelo más radical a sus conductores serán más que suficientes como para dejar bien claras las diferencias entre ambas opciones... pero a la hora de la verdad no es tan sencillo. Mientras que en el RS su excesiva efusividad en el empuje y su peso extra bajo el capó pueden convertir su comportamiento en algo cabezón -con tendencia al subviraje, para entendernos-, en el modelo más racional todo parece más equilibrado, sencillo y provechoso. No me interpretes mal: el RS3 será la bestia que todos querríamos domar a diario, pero sacarle partido a cada carrera de sus pistones parece más factible en el protagonista de este artículo. 

¿Cómo va?

Tremendamente bien. El Audi S3 Sportback 2016 de nuestra prueba es ofensivamente eficiente en todas y cada una de las tareas que le puedas encomendar, y ahora suena un poco mejor que antes. Ponlo en modo Dynamic y podrás sentir cómo el coche puede ofrecerte lo mejor de sí... de un modo tan servicial que puede resultar incluso aburrido. Y va en serio: todo está tan en su sitio en todo momento que parece que nunca tiene suficiente, convirtiendo la conducción en algo tan sencillo que parece que no estés haciendo nada. 

Es Quattro, ¿no?

Sí, pero no lo parece. A pesar de que los ingenieros de la marca afirman que el modelo protagonista de nuestra prueba del nuevo Audi S3 Sportback envía más potencia al eje trasero que nunca, el comportamiento general del coche se asemeja mucho más al de un tracción delantera... lo cual lo deja muy por detrás de vehículos como el Ford Focus RS cuando llega el momento de disfrutar de las curvas. Y no estoy hablando de enfrentarlos a un cronómetro, sino a su capacidad para curar tu depresión. 

Ajá, así que es una pat...

¡No! Se trata de una opción más que solvente para quien necesite un coche con una calidad sobresaliente y un empuje inacabable en cualquier situación... que no quiere demasiadas complicaciones a la hora de ir rápido con él. El Audi S3 lo hace todo tan fácil que incluso tu cuñado podría creerse un piloto sentado tras su volante, lo cual es maravilloso. 

Eso está mejor. ¿Precio? 

El nuevo Audi S3 Sportback está disponible en España con un precio base de 50.040 euros, bastante más caro que un Golf R y que, como siempre, pueden subir tanto como los extras que quieras ponerle -en su catálogo hay pinturas que cuestan 2.800 euros-. Nadie dijo que ser el lujo y la velocidad tuvieran que ser baratos, ¿verdad?

Texto: Ollie Kew

Nuestro veredicto

0.8