BMW X5

El BMW X5 ya va por su cuarta generación. Este todoterreno de BMW es la piedra angular de la familia de vehículos BMW X, la gama más offroad del fabricante alemán. El nuevo BMW X5 inicia en 2018 el siguiente episodio en una exitosa historia del concepto Sports Activity Vehicle (SAV). Fundador de esta reinterpretación del segmento SUV, del BMW X5 se han vendido más de 2,2 millones de unidades hasta la fecha.

La nueva generación del BMW X5 pretende seguir arrebatando ventas a sus rivales. Lo hace con razones de peso, como su diseño, sus atributos en cuanto a conducción confortable, deportiva e incluso autónoma; y sus innovadores elementos en materia de equipamiento. La producción del nuevo BMW X5 se lleva a cabo en la planta de BMW en Spartanburg, un condado en el estado de Carolina del Sur (Estados Unidos). El lanzamiento al mercado del todoterreno de BMW se produce en noviembre de 2018.

El nuevo X5 de BMW es significativamente más grande que su predecesor. Así quedan las dimensiones del BMW X5 en su cuarta generación: la longitud aumenta en 36 milímetros hasta alcanzar los 4,92 metros; el ancho en 66 mm, para llegar a los dos metros; y la altura también aumenta en 19 mm, hasta 1,74 m. La distancia entre ejes crece 42 milímetros, llegando a los 2,97 metros.

Diseño exterior del nuevo BMW X5

En el exterior del BMW X5 se emplea un lenguaje de diseño claro y robusto, que es la nueva identidad visual nueva para los modelos BMW X. Este nuevo lenguaje de diseño destaca por ofrecer unas superficies esculpidas y con carácter poderoso, con líneas de carrocería muy marcadas y precisas cuyo propósito es resaltar la pose imponente sobre el asfalto.

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Un elemento característico de este nuevo X5 es su aparatosa rejilla, que envuelve el frontal del conjunto y está elaborada en una sola pieza que incluye los clásicos riñones de BMW. El carácter robusto del nuevo X5 está complementado por una llamativa línea de carrocería, que fluye de manera dinámica hacia la sección trasera, protagonizada por unas ópticas de diseño tridimensional. Además, para terminar de rematar el conjunto exterior del BMW X5, este es el primer modelo de la marca disponible con llantas de aleación de hasta 22 pulgadas como opción.

La individualización al máximo está presente gracias a las líneas de equipamiento X5 xLine y X5 M Sport. Así mismo, el extenso catálogo de equipamientos opcionales BMW Individual complementan la personalización interior y exterior de este todoterreno de BMW.

El nuevo X5 por dentro

El interior del nuevo BMW X5 2018 cuenta con una atmosfera elegante y moderna, gracias al uso de agradables materiales como la nueva tapicería de cuero Vernasca, un diseño armonioso y un innovador concepto de instrumentación digital. Este sistema engloba el clásico cuadro de instrumentos junto a la pantalla del sistema de infotainment.

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Este concepto se denomina BMW Live Cockpit Professional y está incluido en los equipamientos de serie. Además, el sistema operativo iDrive se ha visto actualizado en funcionalidades e interfaz visual para lucir de manera espectacular junto a la pantalla táctil de 12,3 pulgadas. Ahora cuenta con gráficos claros y una estructura de menú plana, al estilo de los smartphones, que permite un acceso rápido a las diferentes configuraciones y funciones del vehículo. Este sistema es de lo más sencillo de emplear, ya sea gracias al controlador iDrive, el control mediante comandos de voz o el control mediante gestos de BMW.

También se actualiza el BMW Head-Up Display. Ahora cuenta con una superficie de proyección más grande, gráficos 3D optimizados y mayor capacidad para mostrar contenidos adicionales.

Amplio espacio y modularidad interior

La polivalencia del BMW X5 viene de la mano de la tercera fila de asientos, disponible de manera opcional. Ofrece dos asientos individuales de manera adicional, con un cómodo acceso gracias a los asientos eléctricos de la segunda fila, que pueden inclinarse hacia delante. También ayuda la capacidad del maletero del BMW X5, que puede aumentar desde los 645 litros, disponibles con la configuración de asientos traseros estándar, hasta un máximo de 1.860 litros si estos se abaten. La cubierta del maletero es automática y puede ser bajada eléctricamente hasta la base del compartimento de carga.

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Otra característica relevante del BMW X5 en este apartado es su portón trasero dividido en dos secciones. Este portón de dos piezas puede abrirse y cerrarse de manera totalmente eléctrica gracias al acceso de confort, disponible de manera opcional.

Cuarta generación del X5: sus motores

El nuevo BMW X5 está disponible, desde su lanzamiento, con una gama de tres motores de seis cilindros en línea, uno gasolina y dos diésel, representantes de la última generación de propulsores de la marca. A ello se une un poderoso motor V8 Twin-Turbo en algunos mercados. La gama de motores gasolina del BMW X5 parte con el xDrive40i. Este seis cilindros en línea genera una potencia máxima de 340 CV, mientras que el par máximo se sitúa en 450 Nm. Le sigue el xDrive50i, con un todopoderoso 4.4 V8 Twin-Turbo de 456 CV y 650 Nm de par motor, que representa la opción más potente para el nuevo X5.

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En cuanto a motores diésel del BMW X5, se encuentran las siguientes opciones: la gama arranca con el nuevo xDrive30d, que produce unos suficientes 261 CV y 620 Nm de par motor. La variante más potente del X5 en este apartado pasa por el X5 M50d, que equipa un propulsor revisado por BMW Performance. Este motor de seis cilindros en línea y tres litros de cilindrada proporciona un pico de potencia de 400 CV a 4.400 rpm y genera el par máximo de 760 Nm entre 2.000 y 3.000 vueltas.

Su predecesor: la tercera generacion del X5 (2013-2018)

Los grandes todocaminos son una opción más que interesante para aquellos conductores que necesitan un habitáculo amplio y un automóvil capaz de desenvolverse sin ningún tipo de problema en largas travesías por carretera. Incluso las familias más aventureras pueden encontrar en este tipo de coches la solución a sus problemas de espacio, gracias a su gran capacidad de carga.

Pero si hay algo que por definición otorga a estos coches un carácter propio, es su capacidad de alternar la carretera y las vías sin asfaltar sin dar muestras de fatiga. Este tipo de coches nuevos han sido una de las tareas pendientes de las grandes marcas durante los últimos años. Muchos fabricantes premium han tratado de llevar a cabo la difícil tarea de crear un automóvil capaz de circular por cualquier tipo de vía pero que no pierda su carácter elegante y su espíritu lujoso.

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Después de varios intentos, parece que estas firmas van depurando su técnica, pero si hay una que lo ha logrado con excelente maestría, esa es BMW. El fabricante bávaro ha logrado combinar lujo, espacio y versatilidad en su BMW X5, que ahora regresa con una tercera generación renovada y de gran atractivo.

Motores del X5

La tercera generación del BMW X5 llega con una gama de motores que incluye siete variantes. La versión de acceso a gama comienza con el motor diésel sDrive25d de 231 CV, y que opcionalmente puede elegirse con tracción total xDrive. En este mismo tipo de combustible encontramos el motor xDrive30d de 258 CV, al que le sigue el xDrive40d de 313 CV. El propulsor de gasóleo más potente es el denominado X5 M50d, que con tres litros y seis cilindros longitudinales ofrece una potencia de 381 CV.

Las variantes de gasolina del X5 comienzan con el xDrive35i de 306 CV, al que le sigue el xDrive50i, un enorme V8 de casi cuatro litros y medio que asciende hasta unos generosos 450 CV de potencia. Como alternativa a los motores de combustión tradicionales, BMW pone a disposición de sus clientes un motor híbrido enchufable para el X5. Llega con la denominación xDrive40e iPerformance, y combina una potencia de 313 CV, unos consumos verdaderamente reducidos y una autonomía 100% eléctrica teórica de 31 kilómetros.

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La versión más deportiva del X5 recupera la denominación M y se hace mucho más agresiva y potente. El BMW X5 M monta un motor V8 de 4,4 litros que incorpora dos turbos para ofrecer 575 CV y 750 Nm de par. Esto se traduce en que el X5 M puede acelerar de cero a cien kilómetros por hora en solo 4,2 segundos. A este propulsor se le suman diferentes modificaciones estéticas, como el frontal, que recibe una enorme toma de aire central que acentúa su aspecto deportivo.

Todo el conjunto del coche se acerca más al suelo para mejorar la aerodinámica, mientras que las llantas son un diseño exclusivo para esta variante. En el resto de aspectos mecánicos del BMW X5 hay que destacar su caja de cambios de ocho velocidades Steptronic, de serie en todas las versiones. Esta caja de cambios ha sido reajustada para reducir los consumos en las versiones más potentes ente 0,1 y 0,8 litros cada cien kilómetros.

Diseño del BMW X5 F15

El aspecto exterior del BMW X5 resulta mucho más atractivo que en generaciones anteriores. El frontal se hace menos tosco gracias a unas líneas más y mejor definidas. Los conjuntos ópticos de faros dobles, propios de la gama X de BMW, también hacen acto de presencia. En el exterior, el X5 de tercera generación gana en elegancia y dinamismo. Transmite un carácter mucho más ágil y desenfadado que sus predecesores, lo que también se propicia gracias a una línea lateral menos rígida.

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En la trasera del BMW X5 2013 se puede apreciar la firma de BMW en los pilotos y en la caída del portón, haciendo de este coche algo inconfundible. El habitáculo del X5 es estándar para todas las versiones, ya que no es posible elegir diferentes niveles de equipamiento. Sin embargo, existe una oferta de elementos extra que se pueden incluir en el coche. Aun así, el interior no queda sobrecargado por la gran cantidad de mandos, si no que el volante y al cuadro de mandos mantienen su independencia respecto a la consola central.

Es en esta parte donde se concentran los controles del sistema de infoentretenimiento y de climatización, que pueden reducirse al mando con tecnología táctil iDrive. Este control resulta extremadamente útil e intuitivo, sobre todo cuando se adquiere algo de soltura en su manejo. El espacio destinado a los ocupantes dentro del BMW X5 es amplio y está muy bien gestionado, garantizando que ninguno de los pasajeros vaya a sentirse agobiado dentro de este coche.

Por último, el maletero se beneficia de las dimensiones más grandes de la carrocería, ya que el volumen de carga del X5 asciende de 620 a 650 litros respecto a la generación anterior. En general, la valoración del BMW X5 es buena, ya que constituye una alternativa interesante para los conductores que quieran o necesiten las ventajas que ofrece un SUV de estas dimensiones.

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Si bien no se diferencia en exceso de sus competidores, su carácter deportivo y su diseño bien resuelto juegan a su favor. Además, cuenta con el valor añadido de su capacidad offroad, que si bien no sirve para superar vías excesivamente accidentadas, puede ser útil para dar un relajante paseo por el campo.

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