Citroën Nemo

Uno de los recursos más utilizados por los fabricantes de automóviles a la hora de ampliar su oferta de modelos es adaptar alguno de sus coches a otro tipo de funcionalidades. Por ejemplo, cada vez resulta menos extraño ver furgonetas de tipo industrial adaptadas al transporte de pasajeros. Esta fórmula permite combinar el amplio habitáculo de los vehículos industriales con las comodidades pensadas para los viajeros. Y al parecer, es algo que funciona. Citroën ha querido servirse de la ecuación de furgoneta industrial más equipamiento para viajeros gracias a su modelo más pequeño en esta categoría, la Citroën Nemo. Este vehículo industrial pensado para el ámbito urbano ha servido como plataforma para crear un automóvil amplio capaz de transportar a cinco adultos con comodidad y de disponer de un espacio de carga considerable. Puede que inicialmente no llame excesivamente la atención, pero la versatilidad que ofrece este vehículo es asombrosa. Sin embargo, este vehículo es, ante todo, sencillo. No tiene grandes excesos en su diseño, sus opciones de motorización son reducidas y el equipamiento está muy condicionado por el acabado elegido.

En la gama de motores, por ejemplo, solo encontramos un único propulsor disponible para la 'Nemo Multispace', el mismo que en el caso de la versión comercial. Se trata de un bloque diésel 'HDI' de 75 caballos, capaz de impulsar la carrocería de esta furgoneta con facilidad pero sin hacer demasiados excesos. De ahí que este vehículo esté más recomendado para el uso urbano que para largos desplazamientos por carretera. Ahora bien, el consumo es muy bajo, puesto que los datos ofrecidos por la marca indican que no supera los 4,5 litros por cada cien kilómetros recorridos en ciclos interurbanos.

Exteriormente, esta furgoneta conserva el diseño novedoso con el que inicialmente salió al mercado. El conjunto tiene el aspecto tradicional de un furgón pequeño, pero en el frontal llama exageradamente la atención su paragolpes en plástico negro. Los pasos de rueda aparecen ensanchados, mientras que las puertas traseras incorporan un sistema de apertura deslizante. En la trasera se puede apreciar el portón doble con cristales, signo inequívoco de que esta versión está destinada al transporte de pasajeros. En cuanto al interior, mejora considerablemente respecto a la variante comercial. Sin embargo, sigue siendo algo austero. Los acabados están realizados en su mayoría en plásticos que no transmiten una sensación de excesiva calidad, pero que se adaptan a lo que uno puede llegar a esperar de este vehículo. El equipamiento depende mucho del acabado seleccionado y de los extras elegidos. En cualquier caso, esta furgoneta no necesita ningún sistema fuera de lo normal, ya que está pensado para trayectos cortos.

En conjunto, la Citroën Nemo Multispace es sencilla y algo austera, pero resulta perfecta para desplazamientos urbanos o para conductores que alternan el transporte de personas y de mercancías. No promete nada que no pueda cumplir, aunque su precio (a partir de 17.000 euros) podría incluir algún detalle de mayor calidad. Aun así, este vehículo aporta una versatilidad que sería muy difícil de encontrar en muchos de sus rivales.

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