Hyundai Veloster

El Hyundai Veloster fue el primer deportivo compacto producido por Hyundai en Europa desde principios del siglo XXI. Apareció en 2011 con el objetivo de llegar a una clientela jóven amante de los deportivos compactos divertidos de conducir. Sin embargo, tras varios años en venta, y cosechando un modesto número de unidades comercializadas, la firma coreana decidió retirarlo.

Pero no se dieron por vencidos, y los directivos de Hyundai han tomado la decisión de intentarlo de nuevo con una segunda generación de Veloster, que competirá contra rivales tan fuertes como el Volkswagen Golf, el Mercedes Clase A o el Seat León. Todos estos modelos cuentan con unas variantes deportivas muy potentes, y en muchos casos no están disponibles en carrocería de tres puertas, pero siguen siendo coches de deseo para conductores jóvenes.

El Veloster de segunda generación llega con un diseño renovado, más agresivo y deportivo, y con una gama de motores capaz de transmitir unas sensaciones más que agradables a quien se ponga al volante. Además, y tal como ha ocurrido con el 'best seller' de Hyundai, el compacto i30, esta segunda generación contará con el denominado Veloster N, una versión deportiva y mucho más agresiva desarrollada como una variante enfocada a la conducción en circuitos.

Igualmente, y siguiendo el camino de los modelos más recientes del fabricante coreano, este coche contará con un equipamiento a la altura y que no solo resultará confortable, si no que incorporará sistemas de última generación con los que plantar cara a sus rivales 'superequipados'.

Conserva los elementos más característicos de su diseño

Lo más llamativo de la primera generación de Veloster fue su interesante y novedoso diseño. Hyundai sorprendió con una carrocería tipo hatchback de cuatro puertas (sí, cuatro) que acentuaba el espíritu deportivo de este coche. Ahora, la segunda generación hereda todas las virtudes del modelo pionero y las somete a una considerable mejora con las que gana en atractivo y en agresividad.

El frontal, por ejemplo, recibe una gran parrilla hexagonal, seña de identidad de la firma en sus modelos recientes. La parte inferior del paragolpes cuenta con un cuidado diseño aerodinámico, mientras que las ópticas con tecnología LED son rectilíneas, afiladas y agresivas. Llama la atención el capó, diseñado con unas formas aerodinámicas propias de cualquier deportivo con auténtico espíritu ganador.

En los flancos se conserva el diseño de la primera generación, aunque la caída del techo resulta menos forzada y los pasos de rueda se ensanchan para que todo el conjunto gane en musculatura. También sigue conservando su curiosa configuración de puertas, con una en el lado del conductor y dos en el lado del acompañante (de ahí las cuatro puertas), algo que ya se ha convertido en su seña de identidad.

La zaga del nuevo Veloster tampoco se aleja demasiado del modelo anterior, pero perfecciona y moderniza muchas de sus líneas. El portón de acceso al maletero sigue sin ser demasiado grande, algo que se traduce en una luneta bastante compacta. Los pilotos fluyen con suavidad desde el pilar C hasta el centro de la trasera. Por último cuenta con un generoso paragolpes y un spoiler inferior en el que encajan las dos salidas del escape, piezas que le añaden todavía más músculo al coche.

El habitáculo combina tecnología y deportividad

El interior del nuevo Veloster ha evolucionado notablemente en comparación con el modelo original, y se ha convertido en un espacio que desprende más calidad y que cuenta con mejores acabados, los cuales combinan sin problemas con el ambiente deportivo que se respira en todo el interior.

El puesto de conducción está muy bien elaborado, siendo deportivo pero sin caer en los excesos. El volante, los relojes del cuadro y la palanca de cambios tienen un ligero aire 'racing' que contrasta con la naturalidad con la que se presentan el resto de controles. Aún así, el Hyundai Veloster no tiene miedo de mostrar lo que verdaderamente es a través de pequeños detalles, como los pedales en aluminio disponibles en algunos acabados.

Más allá del espacio destinado al piloto, el resto de ocupantes del Veloster (hasta cinco) podrán disfrutar de este coche. El copiloto cuenta con mayor espacio que aquellos que viajen en las plazas traseras, que sacrifican su confort para adaptarse a la línea descendente del techo. En cualquier caso, son aptas para niños o para desplazamientos no muy largos.

Los asientos no resultan excesivamente deportivos, algo que se ha reservado para la versión más agresiva y potenciada del coche. En cualquier caso, no deberían causar incomodidad por muy agresiva que resulte la conducción del coche.

También mejor en equipamiento

Como no podía ser de otra forma, un coche como este con la firma de Hyundai cuenta con un equipamiento generoso incluso en los acabados más básicos. Y no solo eso, si no que este equipamiento también responde al espíritu deportivo del Veloster.

Como cabría esperar, este coche incluye varios asistentes a la conducción, como un asistente de mantenimiento en el carril, el denominado 'Torque Vectoring Control', control de crucero inteligente... o lo que en definitiva sería una soberbia selección de sistemas que ayudan al piloto en su labor. En materia de seguridad puede que esté un paso por detrás de sus rivales, auqnue sigue conservando los sistemas básicos tanto en seguridad activa como pasiva.

También incorpora un nuevo sistema de conectividad con 'Apple CarPlay' y 'Android Auto' incluídos. Asimismo, la pantalla táctil que concentra este sistema también puede ofrecer información técnica y en vivo sobre el comportamiento del coche, las revoluciones, el soplado del turbo (en la variante que lo incorpora) o medidor de fuerzas 'G'.

Motores eficientes y deportivos

La gama de motores del nuevo Veloster se ha renovado por completo, pero la intención de los ingenieros sigue siendo la misma: lograr un equilibrio perfecto entre deportividad y eficiencia. Por ello, siguen apostando por bloques de poca cilindrada que ofrezcan una potencia intermedia pero suficiente para mover al coche con alegría. El motor de acceso a gama es un gasolina de dos litros de cilindrada y cuatro cilindros con aspiración natural. Llega hasta los 150 caballos de potencia, muy adecuada para mover un coche como este, cuyo peso es bastante reducido. La segunda opción más potente pasa por un 1.4 turboalimentado que desarrolla 204 caballos. Este propulsor sigue conservando un consumo muy comedido a la vez que exprime al máximo el carácter deportivo del Veloster.

Hyundai Veloster N, la variante más 'picante'

Desde que se pusiera a la venta el Hyundai i30 N, la variante más deportiva del compacto coreano, han sido muchas las especulaciones sobre cuál sería el siguiente modelo en contar con un acabado de altas prestaciones. Y sin duda, el Veloster siempre se posicionó como un candidato óptimo. El la firma han debido opinar lo mismo, ya que junto con el nuevo Veloster han anunciado la versión 'N', con un motor turbo que desarrolla 275 caballos y que convierte a este interesante deportivo en una auténtica máquina para disfrutar en circuito. Sin duda, es la incorporación perfecta a la familia 'N' de Hyundai.