Jaguar XK

El Jaguar XK fue un coupé deportivo comercializado por el fabricante británico. Se tratada de un automóvil de aspecto sofisticado que con su diseño pretendía evocar a los deportivos más clásicos del fabricante.

Aún así sus ventajas no estaban solo en su diseño, ya que este coche ofrecía una habitabilidad excelente en las plazas delanteras gracias a sus generosas dimensiones. A esto hay que sumar sus prestaciones, apoyadas en un motor potente que más tarde recibió una segunda variante con unas prestaciones aún mejores.

A la hora de competir en el segmento de los deportivos de lujo, este coche se enfrentaba a modelos como el Mercedes SL, el BMW Serie 6 o el Porsche Cayman. Todos ellos son automóviles muy poderosos que representan el estilo de cada fabricante. Sin emabrgo, el Jaguar XK contaba con claras influencias de modelos clásicos, lo que le otorgaba unas características muy apreciadas.

Diseño elegante y con homenaje al pasado

Las formas que componen el exterior del Jaguar XK buscan un equilibrio entre elegancia y deportividad al más puro estilo de los mejores deportivos británicos. Sin embargo, este coche cuenta con varios puntos a favor gracias a que es la representación moderna de lo que la firma entiende como lujo deportivo.

El frontal es muy afilado y agresivo, con la intención clara de aportar una presencia más imponente. Destaca la parrilla, que con su diseño ovalado pretende rendir homenaje a los deportivos de los años 50 y 60 de la firma.

En el lateral las líneas fluyen con suavidad hasta dibujar formas relajadas y equilibradas. Cuenta con un largo capó que caracteriza a este coche, mientras que el peso del habitáculo recae sobre la mitad posterior del conjunto. Los pasos de rueda traseros aportan un diseño más robusto y musculoso.

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En la zaga, este Jaguar presenta una curiosa combinación de formas aerodinámicas y de un diseño muy interesante en los pilotos. A pesar de que son elementos con gran personalidad, la combinación de todos ellos no es forzosa y crea un conjunto atractivo y muy deportivo.

En el interior se aprecia el esfuerzo por el lujo y la sofisticación. Todos los elementos cuentan con la firma de Jaguar en lo que a calidad se refiere, y el habitáculo resulta acogedor y muy bien diseñado.

Cuenta con una importante dotación tecnológica, a la que acompaña una buena selección de materiales y acabados que decoran y embellecen el conjunto.

Dos niveles de potencia

Al tratarse de un verdadero deportivo, el Jaguar XK no se puede conformar con cualquier propulsor. Debe montar una mecánica capaz de ofrecer unas prestaciones sorprendentes pero sin que le hagan perder ese aire sofisticado tan característico.

El Jaguar XK se ofrece con dos motores. El primero es un bloque atmosférico de 4,2 litros que desarrolla 298 caballos. La variante más potente, denominada XKR, se basa en el mismo bloque, aunque añade un compresor para llegar hasta los 416 caballos. En ambos casos se añade una caja de cambios automática de seis velocidades.

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