Toyota Supra

La historia del Toyota Supra es una historia de éxito y de pasión por el automovilismo deportivo. Este modelo se convirtió en la estrella del fabricante nipón entre 1978 y 2002, más de veinte años en los que fue el deportivo japonés preferido de muchos amantes del automovilismo. Las antiguas generaciones han mostrado en circuito sus habilidades y rendimiento deportivo.

El Supra siempre llamó la atención por su enorme frontal, un habitáculo de diseño deportivo y una zaga coronada por un gran alerón trasero. Además, este coche contaba con un precio de venta lo bastante interesante como para resultar atractivo incluso para la importación a Europa y Norteamérica, donde repitió el éxito cosechado en su país natal.

Actualmente, algunas versiones del Toyota Supra original son el objetivo de coleccionistas y amantes de deportes de motor, y quince años después de dar por concluída su producción no es difícil ver algunas unidades en competiciones de drifting o deportes similares.

Un mito que empezó llamándose Celica

Originalmente el Toyota Supra se diseñó como la versión más deportiva del por aquel entonces modelo estrella de la marca japonesa, el Toyota Celica. De hecho, en el mercado oriental su nombre era Celica, y Supra tan solo un apellido que indicaba que estaba por encima del resto de versiones.

Sin embargo, tal fue la demanda de este modelo que el generaciones posteriores apostó por convertirse en independiente y mantener la denominación que lo convirtió en historia viva del motor: Toyota Supra.

¿Habrá merecido la pena la espera?

Durante muchos años y tras concluir su producción, el Toyota Supra se convirtió en una especie de animal mitológico del que tan solo quedaban un puñado de unidades en el mundo destinadas a algunos privilegiados. Sin embargo, en el año 2014, Toyota ya había empezado a trabajar en una nueva generación del Toyota Supra para satisfacer las demandas de todos aquellos apasionados del motor.

Y tras mucha espera, por fin hemos conocido que la quinta generación de este modelo llegará al mercado en el año 2018. El nuevo Supra ha sido desarrollado conjuntamente con BMW, por lo que se puede esperar que sea aún más deportivo de lo que se recuerda.

Su imagen será deportiva y muy conceptual

Las primeras imágenes que se han podido ver de este coche no son más que algunos renders y fotos espía de una unidad de pruebas rodando por Nürburgring. Sin embargo, ya se pueden adivinar cuales serán sus formas más características. Su aspecto será similar al modelo original, con un frontal alargado y que en este caso tendrá un diseño depurado y futurista.

El habitáculo responderá a los diseños más conceptuales de BMW y de Toyota, aunque contará con un acabado inspirado directamente en la competición. Finalmente, la parte trasera se vuelve más musculosa y con un aspecto muy deportivo dibujado con líneas modernas.

De momento, todo indica que la quinta generación del Supra prescindirá de su característico alerón, aunque esperemos que Toyota se replantee considerar un cambio como este.

Un gran puñado de caballos y un precio más privativo

En cuanto a sus motores y precio, aún nos hay ningún tipo de información disponible. Todo apunta a que disfrutará de una generosa cantidad de caballos de potencia y, para tristeza de muchos, puede que no resulte tan asequible como cabría esperar. La nueva generación del Toyota Supra tendrá a duros rivales, como el Honda NSX o su primo hermano, el BMW Z4.

En cualquier caso todavía queda mucho por saber de esta nueva generación que supondrá el renacimiento de un mito.

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