Seguro que alguna vez has discutido con tu cuñado sobre coches. A lo mejor sobre los motores más fiables o sobre coches deportivos. Y lo más normal es que siempre tenga él la última palabra. Pero con estos siete modelos lo dejarás boquiabierto y sin nada que decir. ¡A él y a todo el mundo!

Mazda MX-5

El Mazda MX-5 es uno de los vehículos con los que es más fácil esbozar una sonrisa nada más ponerte a su volante. Está bien, no tiene un gran maletero y el espacio en el habitáculo es más bien pequeño. ¡Si hasta ha habido que desplazar la guantera a la zona que hay entre los asientos! Pero créeme, eso no importa cuando estás disfrutando de su directa dirección, de su motor atmosférico o de su propulsión trasera. Y encima cuesta menos de 30.000 euros.

Tesla Model 3

En realidad podría valer cualquier Tesla por su derroche tecnológico, pero el benjamín de la firma norteamericana es lo último de lo último. Juega en la misma liga que un BMW Serie 3, un Mercedes-Benz Clase C o un Audi A4, pero es 'diferente'. Su habitáculo es enorme, pero lo que más llama la atención es que no hay botones más allá de los dos que tiene en el volante. Tienes que reconocerlo: te guste o no, el Tesla Model 3 es especial... a falta de alternativas.

Audi RS6 Avant

Un velocista metido en el cuerpo de una berlina con clara vocación familiar. Eso es lo que es el Audi RS6 Avant, un coche que te dejará sin palabras incluso a ti cada vez que lo cojas. ¿Cómo demonios puede empujar tanto y tan bien un vehículo pensado para ir siempre con tu familia? Lo mejor es que también te sirve para irte al circuito cuando te apetezca desestresarte un rato y olvidarte de todo. Lo malo, como casi siempre, su precio.

Ford Fiesta ST

Parece increíble que, con lo pequeño que es, el Ford Fiesta ST esté tan rematadamente bien hecho. Pero llama más todavía la atención que lo haga con un propulsor de tan solo tres cilindros. ¡Si siempre los habíamos puesto a caldo! Pues en este Ford te olvidas por completo de ello en cuanto aprietas el botón de arranque. Ofrece las sensaciones de los deportivos de antes (o casi todas), a cambio de una tarifa razonable y un mantenimiento sencillo.

El Mercedes-AMG G 63 siempre ha sido un coche cuyo entorno natural se encuentra fuera del asfalto, pero con la última actualización de este alemán quizá haya algo de esperanza para él en la carretera. Sea como fuere, se trata de un avión incluso pesando más de dos toneladas. ¡Cómo empuja, Dios mío! Pero no solo es eso, sino cómo suena, cuánto lujo puede añadir y, ahora sí, la tecnología que integra. Además, mantiene los detalles de siempre, como las bisagras a la vista o el asidero del copiloto.

Cupra Ateca

Que su imagen de todoterreno casi igual a la de un Seat Ateca no te engañe: el Cupra Ateca es un deportivo con mayúsculas. El primer modelo de la marca deportiva española no parece un SUV por comportamiento y tiene una puesta a punto equiparable a la del León Cupra. Va rapidísimo y, a la vez, está muy seguro de lo que hace. Su precio puede parecer elevado para ser un Seat disfrazado, pero piensa, ¿quién ofrece esa potencia y ese espacio por una cantidad similar?

BMW i8

El BMW i8 no es un uno de los coches nuevos de 2019, eso está claro. Ya lleva mucho tiempo en el mercado, pero todavía nos sigue cautivando con un motor híbrido (¿quién dijo que estos no podían ser deportivos?) capaz de quitarnos el hipo y hasta de convencer al mismísimo Dieter Zetsche (¿no?). Por no hablar de su estética, que en persona impresiona muchísimo más que en foto. ¿No te gusta el coupé? No te preocupes, también lo hay en 'sabor' descapotable.