El Mazda3 MPS y el Volkswagen Golf R32 se pueden considerar rivales directos, por época, por potencia y por planteamiento deportivo. Dos pequeños, pero matones, compactos que han sobrellevado el paso del tiempo de maneras muy diferentes. El Volkswagen Golf se ha convertido con su V6 atmosférico en todo un reclamo para puristas. El Mazda3, en cambio, se ha convertido en una rareza, olvidada en muchos casos. Pero, ¿cuál fue mejor?

Diseños con diferencias

Lo primero que llama la atención de estos dos compactos es su diseño. En el caso del Mazda vemos un diseño bastante discreto, con un nuevo paragolpes, un espectacular sistema de escape y llantas multiradio de 18 pulgadas. El Volkswagen también es bastante discreto: si no fuera por su color azul muchos ni lo reconocerían. Destacan las tomas de aire más grandes en el frontal pero sobretodo su mítica salida de escape central.

El Mazda3 MPS es algo más grande, unos 10 cm, y sus formas son más cuadradas, lo que recuerdan un poco a un monovolumen. El Golf es un Golf y sus líneas han sabido madurar muy bien con el paso del tiempo. Parece más compacto, más de nuestro tiempo: en ese sentido creo que el Mazda ha envejecido algo peor.

Un interior con sabor racing

En el interior se combina la practicidad clásica de cualquier compacto con ciertos toques deportivos que hacen que la experiencia mejore. En el Mazda destacan los asientos deportivos, bastante chulos con un buen agarre lateral y bastante cómodos. El Volkswagen Golf R32 podía montar los asientos deportivos derivados del Golf GTI o bien unos espectaculares buckets tapizados en cuero y calefactables: ¡uno de los extras más deseados y con razón!

En cuanto a diseño, el Mazda destaca por una cantidad ingente de pequeños botones, no muy prácticos la verdad. Tiene un volante multifunción, unos pedales en aluminio y un velocímetro tarado hasta los 280 km/h. El Golf me parece más redondo en ese sentido: los mandos están mejor dispuestos y cuenta con un volante multifunción deportivo más chulo. El cuadro de mandos del R32 tiene los diales azules, color corporativo de la gama R de Volkswagen.

Comportamiento dinámico

Hasta aquí hay bastantes similitudes, aunque creo que el Volkswagen Golf R32 ha sabido sortear mejor el inexorable paso del tiempo en el apartado estético. Ahora bien, a partir de ahora empiezan los cambios más importantes. La gran diferencia a nivel dinámico es que el Mazda3 MPS envía la potencia al eje delantero únicamente, mientras que el Volkswagen Golf R32 dispone de un sistema de tracción integral 4Motion mucho más eficaz.

El resultado es que el Golf tiene un comportamiento más eficaz sobre cualquier terreno, mejorando la tracción sobre cualquier terreno. En este sentido creo que el Mazda3 no puede competir frente al alemán.

Motor: ¿turbo o atmosférico?

El motor es otra de las grandes diferencias entre estos dos compactos deportivos de la primera década del Siglo XXI. El Mazda3 MPS apostaba por un cuatro cilindros turbo de 2,3 litros capaz de desarrollar 260 CV y 380 Nm de par desde las 3.000 vueltas. Por su parte, el motor del Volkswagen Golf R32 es el archiconocido VR6 de Volkswagen, atmosférico, con 3,2 litros de cilindrada, 250 CV y 320 Nm de par desde las 2.800 vueltas.

Aquí para gustos colores, pero está claro que el motor turbo del Mazda tiene más brío, especialmente en bajas vueltas: acelera de cero a cien en 6,1 segundos, mientras que el Volkswagen lo hace en 6,5 segundos. Si te gusta el tirón del turbo, el Mazda es mejor. Si eres de un gran motor atmosférico, más elástico, el R32 te encantará.

Precio: el R32 es un icono

Hay algo que está claro: el Volkswagen Golf R32 es uno de los compactos deportivos más queridos del mercado. Su diseño, su tracción integral pero sobretodo su motor V6 y ese sonido tan característico lo han convertido en un mito. Y eso se nota en el precio. El Mazda3 MPS parte de unos 9.000 euros y hay una gran oferta en torno a los 11.500 euros. El Golf R32 parte en torno a los 12.000 euros y la mayor oferta se mueve en torno a los 14.000 euros.

Conclusión

Está claro que la popularidad de un Volkswagen Golf es mayor que la de un Mazda3 y eso se refleja en el precio y en su carisma. Ahora bien, es curioso como en una misma época surgieron dos compactos tan diferentes. El Mazda3 MPS es un compacto japonés con un comportamiento bastante radical: el motor es más explosivo y la suspensión algo más dura. El R32 es más equilibrado, como buen Golf, y su motor emite un sonido glorioso. La tracción integral le da un comportamiento más eficaz y su motor parece no terminarse nunca. ¿Mi conclusión? Tengo un R32 en mi garaje así que no puedo ser imparcial, lo siento.