Ah, Nürburgring. Ese circuito que nos hace soñar y, si os soy sincero, a mí me provoca alguna que otra pesadilla cuando pienso en este trazado con el asfalto húmedo...

Pero para los pilotos de verdad es un santuario. El Maranello de los Ferraristas o la Porschestrasse de los porschistas. El Infierno Verde, como lo bautizó Jackie Stewart.

Coches deportivos

Los coches deportivos nos hacen soñar despiertos: grandes prestaciones, promesa de sensaciones al volante, de una conducción sin igual. Los hay grandes, pequeños, bonitos, feos, caros y baratos. Pero todos ellos tienen en común una cosa: si merecen la pena, están aquí. ¡Sigue el link!

A lo largo de sus 20,8 kilómetros y 73 curvas se han forjado leyendas. Ha habido días de gloria y jornadas para olvidar, como el accidente de Nikki Lauda. No puede ser de otro modo en nada que aspire a convertirse en leyenda.

En cualquier lugar del mundo se fácil encontrar coches con una pegatina que simula el trazado del circuito. Algunos van más allá y lucen con orgullo esa que dice “I rocked the Nürburgring”, conseguida tras soltar un buen puñado de euros en el puesto de merchandising que hay en la entrada del circuito (y tras dar una vuelta por 25 o 30 euros según el día).

También la atracción que provoca el trazado es poderoso. Los fabricantes lo saben. El eléctrico más rápido. El familiar más veloz. El deportivo de calle. El deportivo preparado. Todos y cada uno de los segmentos tienen un tiempo en NB.

Y luego entramos en el terreno de las versiones especiales. Es cierto que hay circuitos con una historia similar de victorias y derrotas, de golpes mortales y golpes maestros. Está Spa, Kyalami, Laguna Seca, Indianápolis y sus 36 pulgadas de ladrillo original. 

Pero hay pocos que presten su nombre a modelos, como sí ocurre con Nürburgring. Pero para que no sea un listado al uso, me permito el lujo de ordenarlas de más necesarias para el correcto funcionamiento de la humanidad hasta la más absurda e innecesaria operación de marketing.

1. Seat León Cupra Sub8

Mucho antes de que Seat se metiera en la aventura de lanzar Cupra como marca separada, los modelos que llevaban ese apellido eran lo más de lo más. No solo en la marca, sino en el panorama internacional. Decir que un Seat León Cupra era uno de los mejores compactos del momento no era una ninguna barbaridad.

Una muestra: ¿Sabes cuál fue el primer modelo de tracción delantera en bajar de los ocho minutos en Nürburgring? Exacto. Y para conmemorarlo se lanzó el paquete Sub8 Performance Pack, aunque por desgracia fue una opción que solo estuvo disponible en el marcado británico.

Se ofrecía en el León Cupra 280 y contaba con llantas más ligeras y neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2, frenos Brembo más potentes y, en la línea de algunos modelos como en Renault Mégane R26.R, prescindía del aire acondicionado o el sistema de sonido para ahorrar peso.

2. Hyundai N

Hasta la aparición de Ioniq, submarca especialista en coches eléctricos, la división N de Hyundai era la única rama "aparte" de los coreanos. En su haber por ahora figura solo un par de productos: el Veloster N, que no se vende en Europa, y uno excepcionalmente bueno: el Hyundai i30N. Uno de los mejores compactos deportivos de la actualidad (si no el mejor). 

Aquí el Infierno Verde no aparece directamente, pero aunque no lo creas está en esa N. N de Nürburgring. O de Nordschleife. Ahí tienen la base, y ahí es donde ponen a punto los coches bajo la supervisión de Albert Biermann, antiguo jefe de BMW M.

3. Lexus LFA Nürburgring Edition

Quizá está llamado a convertirse en uno de los superdeportivos de culto con el paso del tiempo, a la altura de modelos como el Lamborghini Countach, el Ferrari F40 o el Porsche 959, aunque también es posible que aún sea demasiado “nuevo” para ello.

Su motor V10 de 560 CV fue una obra de ingeniería. El golpe de marketing lo dieron al colocar un cuentavueltas digital porque uno analógico no era capaz de avanzar por el dial a la misma velocidad que el motor se revolucionaba.

El LFA Nürburgring Edition añadía 10 CV adicionales y una puesta a punto específica para circuito que replicaba la puesta a punto de los modelos VLN que compitieron en las 24 Horas de Nürburgring. Quizá por eso consiguió hacer 7 minutos con 14 segundos, aunque de manera extraoficial.

De las 50 unidades planeadas inicialmente se hicieron 64, y salían decoradas en cuatro colores: Glossy Black, Matte Black, Race Yellow y Whitest White.

4. Opel Corsa OPC Nürburgring Edition

Qué buen coche era el pequeño Opel Corsa OPC. Yo diría que era el mejor de una gama que en tiempos contaba con un representante en todos y cada uno de los modelos, desde el Meriva hasta el Zafira.

Las 500 unidades que se hicieron del Opel Corsa OPC Nürburgring Edition llegaron con colores exclusivos, un par de insignias conmemorativas y algunos cambios estéticos, como un paragolpes rediseñado y unas llantas distintas.

Pero sin duda lo mejor eran los retoques mecánicos que le permitían, por ejemplo, emplear gasolina de 100 octanos. También llevaba un escape menos restrictivo y ganaba potencia: el Corsa OPC Nurburgring Edition pasaba de 192 a 210 CV. También se rebajó la altura de la carrocería en 20 mm y se le acoplaron frenos más potentes.

5. Alfa Romeo Giulia y Stelvio NRING

Hay que reconocer que hay pocos coches que merezcan llevar esta denominación como el Stelvio, que batió el récord del circuito para un SUV hace un par de años... y también como el Giulia, que hizo lo propio en su clase.

Se hicieron 108 Giulia y Stelvio NRING, y utilizaban como base las versiones QV, por lo que montan el V6 biturbo de 2,9 litros con ADN Ferrari. Con 510 CV y 600 Nm, en Alfa Romeo pensaron que tenían más que suficiente. Sí que añadieron un equipamiento especial enfocado a subrayar su carácter radical: destacan los frenos cerámicos, los bacquets Sparco y el techo en carbono para el Giulia.

6. Audi R8 Green Hell

Audi registró el nombre a principios de año, por lo que muchos pensaron que se avecinaba una versión más harcore del deportivo alemán. Al final ha resultado ser una edición limitada a 50 unidades para todo el mundo.

En las imágenes de la marca aparece pintado en el mismo verde del Audi R8 LMS de Audi Sport Team Phoenix, aunque también estará disponible en Ibis White, Daytona Grey o Mythos Black.

El motor sigue siendo el V10, pero en su versión más potente, la Performance, con 620 CV, tracción quattro y cambio S-Tronic. En el interior, una oda al cuero y el Alcantara, materiales que están repartidos por el salpicadero y lso asientos deportivos tipo Bacquet.

De esta variante más lujosa que deportiva que es el R8 Green Hell se ha hecho público el precio, pero solo en Alemania: costará 233.000 euros.  

7. Nissan Skyline GT-R V-Spec II Nur

Solo el nombre Skyline ya es un homenaje en sí mismo al circuito alemán desde que se lanzaron las variantes R33, ya que fue el primer modelo de calle en bajar de los ocho minutos en el circuito allá por 1996.

Y para celebrarlo, en Nissan decidieron lanzar una edición limitada a 1.003 unidades del GT-R Nur (no, no faltan letras) que tenía un trabajo aerodinámico mayor (solo mira a ese alerón), empleaba partes de carbono, como el capó, y el seis en línea RB36 recibía un turbo más gordo con el que conseguía 330 CV.

8. BMW E34 M5 Nürburgring

Hoy en día es un hecho que una berlina de altas prestaciones como el BMW M5 tiene varios modos de conducción, dirección de asistencia variable y un diferencial autoblocante controlado electrónicamente capaz de adaptarse a todas y cada una de las carreteras del Sistema Solar. 

Pero en los años 90 la cosa era más sencilla: 'simplemente' había que hacer un buen chasis y, si acaso, añadir un par de retoques con respecto a las versiones normales.

El M5 Nürburgring tenía una suspensión específica con estabilizadoras más gruesas y con modo sport, neumáticos más anchos y una dirección de endurecimiento progresivo en función de la velocidad.

9. Nissan GT-R Nismo N Attack

El Nissan GT-R no es suficiente para ti, ¿no? Puedes probar el Nismo. ¿Tampoco? Bueno, afortunadamente, los japoneses lanzaron en 2015 una edición especial denominada N Attack que conmemoraba la hazaña de su coche deportivo por defecto: hacer un tiempo de 7:08.679 minutos en el Infierno Verde. O, dicho de otro modo, girar más rápido que todo un Pagani Zonda F

10. Toyota Corolla Altis ESport Nürburgring Edition

Para terminar, no podía dejar pasar la oportunidad de amargar todo este buen sabor de boca con una de las ediciones especiales más innecesariamente innecesarias del mundo.

¿Por qué querría alguien tener una versión como esta del Toyota Corolla que apareció en 2015? Se trata de una carrocería que solo se comercializaba en el sudeste asiático: el Corolla Altis era un sedán cuya versión deportiva se denominaba ESport mucho antes de que el mundo supera lo que eso significaría unos años más tarde.

Este modelo tenía importantes cambios: la suspensión era algo más enérgica y los bajos estaban pintados en el color de la carrocería y la parrilla pasaba a ser negro brillante. En pleno auge de los leds, las luces de día pasaron a ser de este tipo y para rematar, aparecía un difusor trasero digno del trazado alemán, que como todo el mundo sabe, ayuda a ganar unos buenos caballos extra de potencia.  En este caso parece que estaba inmunizado a los aumentos de potencia: el 1.8 atmosférico de 141 CV siguió ¿alegrando? a este modelo.