5 modas del tuning que deberían desaparecer... ¡cuanto antes!
¿Encuentras absurdas las modificaciones que podrían hacer tu coche odioso a diario de las que te hablamos hace tiempo? Prepárate: aquí tienes unas cuantas modas tuning que deberían desaparecer cuanto antes por el bien del universo petrolhead... y la Humanidad al completo. Sé que tienes colegas que las siguen. Y que tú también te has planteado hacerle algo parecido a tu preciado Opel Kadett GSi. Simplemente recuerda algo: él no lo haría.
5 modas del tuning que deberían desaparecer - ‘Stance’
La primera de las modas del tuning que debería desaparecer es, sin duda alguna, la conocida en sus círculos como ‘stance’. Básicamente consiste en montar las llantas más desproporcionadas posibles teniendo en cuenta el tipo y potencia del coche, bajar la suspensión hasta límites que rozan el absurdo -y todos los badenes, ya de paso- y modificar las caídas de cada rueda para que éstas parezcan las del maldito DeLorean DMC-12 de ‘Regreso del futuro’ en su segunda entrega. No, que pueda quedar "tó guapo" no lo justifica. Convierte el coche en algo casi tan inexplicable como sus propietarios. Y para muestra, un botón vídeo:
5 modas del tuning que deberían desaparecer - ‘Rice’
La siguiente moda que debería desaparecer el mundo del tuning -aquí 10 coches arruinados por sus dueños- es la conocida en el mundo anglosajón como ‘rice’ y que aquí, de toda la vida, se ha definido como ‘macarrismo’. En esencia se trata de añadir a tu cepo todo tipo de aditamentos derivados del universo de la competición cuyo único efecto real es dejarle claro a todo el mundo que tienes un criterio de lo más cuestionable en cuanto a la estética... y poner muy nerviosos a los agentes de la Guardia Civil de Tráfico. ¿En realidad crees que ese alerón de fibra instalado en casa con una taladradora de Lidl aportará algo de carga aerodinámica al tren trasero de tu ZX? ¿En serio?
5 modas del tuning que deberían desaparecer - ‘Rat style’
La siguiente de las modas del tuning que deberían desaparecer es la bautizada como ‘rat style’ y, por suerte, en España no está demasiado extendida al tratarse de un movimiento relativamente reciente. Consiste en tener elementos como el vano motor del coche o su habitáculo para entrar a vivir mientas que a su carrocería se le da una mano de cariño falsamente descuidado haciendo que parezca un amasijo de chatarra listo para terminar sus días en el desguace. Sí, en determinados artefactos es gracioso... pero en un Volkswagen Golf del 99, no.
5 modas del tuning que deberían desaparecer - Tubos de escape rectos
Oh, sí: sin duda alguna una de las modificaciones más realizadas en los coches más tuneados de España es la de eliminar los tramos del escape diseñados para reducir el sonido emitido... sustituyéndolos por un tubo recto e inoxidable de mayor sección para amplificar el ruido. ¿El resultado? Pues eso mismo: ruido. No emite una nota agradable. No suena como un cohete de competición. Simplemente parece un Orion con el escape rajado en los colectores y por su culpa tu motor tendrá menos capacidad para retener que los esfínteres de un recién nacido. No lo hagas. No. Por favor: no.
5 modas del tuning que deberían desaparecer - ‘Pegatinismo’
Vale, la última de las modas del tuning que deberían desaparecer que hay en este artículo tiene un nombre impuesto por mí mismo y, en realidad, no sé cómo se la conoce en los círculos de la cultura de la modificación de cepos... pero no importa: cubrir un coche con cientos de pegatinas no queda bien, no es elegante y no disimula que en realidad se trata de un humilde Honda Civic del 93 que se está cayendo a pedazos. Ah, sí: olvídate de poner una pegatina de Nürburgring si nunca has pisado el circuito. Además de traer mala suerte queda igual de bien que una imagen de la Virgen junto a la palanca de cambios de un Ferrari 812 Superfast. En serio.