7 cosas que aprendimos conduciendo el Rolls-Royce Spectre

Prueba del Rolls-Royce Spectre

Hace poco que conocimos el Rolls-Royce Spectre y nos sorprendió para bien. Estas son 7 cosas que aprendimos de él.

Recientemente pudimos conducir el Rolls-Royce Spectre, el nuevo coche eléctrico de la marca británica, en Sudáfrica. Durante nuestro tiempo al volante, resolvimos algunas dudas y empezamos a hacernos varias ideas. Por ello, hoy os traemos 7 cosas que aprendimos conduciendo el Rolls-Royce Spectre.

Texto original de Jason Barlow

Se ve espectacular en marcha

Rolls-Royce Spectre

Lo sentimos, pero incluso estas imágenes increíbles no le hacen justicia a la realidad. El Spectre es una gran declaración de intenciones y ahora más que nunca, en un momento en el que Rolls-Royce finalmente ha adoptado la electrificación. Es más imponente que bonito, pero es fabulosamente coherente. 

La forma general está definida por una línea de silueta, una línea de hombro y lo que Rolls llama una línea de onda. Con esto, necesita esas ruedas de 23 pulgadas para hacer su mejor trabajo visual. Además, no todo es estética, ya que sus números aerodinámicos son impresionantes: la cola cónica ayuda a lograr un coeficiente de 0,25.

Por otra parte, en el aspecto de este modelo destaca la parrilla, que es la más ancha jamás vista en un Rolls-Royce y también está diseñada para reducir la resistencia al aire. Asimismo, la abertura debajo de la parrilla y el parachoques es la que aporta el aire de refrigeración. 

Finalmente, en el Spectre, el ‘Espíritu del Éxtasis’ se inclina más hacia adelante que antes, para mejorar la eficiencia, sin que ello altere el estilo de la marca. Asimismo, los faros divididos se ven mejor resueltos aquí que en otros Rolls, con los superiores permanentemente iluminados. 

Se siente como un Rolls-Royce

Rolls-Royce Spectre

Una nota: estamos conduciendo un automóvil de preproducción, en una prueba de clima cálido de última etapa en Sudáfrica. 'Sentir' es la palabra clave aquí, aunque quizás no en el sentido tradicional de la carretera. Es una idea en la que el CEO de Rolls-Royce, Torsten Müller-Ötvös, está particularmente interesado. 

Recuerda: el Rolls-Royce Phantom se puede conducir con la punta de los dedos, por lo que estos automóviles tienen una impronta dinámica única. Con esto en mente, el Spectre es enérgico, aunque no es un deportivo. Mide cinco metros de largo, dos de ancho y pesa más de tres toneladas. Aun así, el aplomo es asombroso y los pesos están calibrados agradablemente. 

La sensación de la dirección es un arte oscuro, pero el Spectre ofrece una linealidad y un equilibrio muy especiales. Las baterías pesan 700 kg, por lo que, incluso con su chasis de aluminio, es un coche pesado. Al menos su ubicación debajo del suelo ayuda. Por otra parte, un eje trasero activo también mejora la maniobrabilidad a baja velocidad, y la tracción total se da por hecho. 

Asimismo, en cuanto a la legendaria calidad de conducción de la marca, los componentes son como los del Ghost, aunque Rolls aún no ha publicado todos los detalles. El Spectre tiene el sistema de suspensión Planar, que agrega un amortiguador de masa mecánico en la horquilla superior de la suspensión delantera para mejorar el control de la carrocería. Así, el andar es sublime.

Hay desafíos muy específicos cuando se trata de desarrollar un Rolls-Royce eléctrico

Prueba del Rolls-Royce Spectre

Conducimos con el líder del proyecto Spectre, Joerg Wunder. Ese es el hombre que tiene que hacer frente a una declaración de misión que básicamente dice que lo bueno nunca es lo suficientemente bueno. Incluso algo muy bueno no es aceptable. Este coche tiene que ser espectacularmente refinado. 

En el Spectre, el sonido de un alfiler cayendo sobre la alfombra de lana de cordero podría provocar una apoplejía en Joerg, que por lo demás era afable. Y, sin embargo, el silencio absoluto es opresivo, por lo que Joerg tiene la tarea de lograr el equilibrio perfecto. 

“También puede ser un problema de seguridad”, dice. “Se necesita una cierta cantidad de ruido para que el conductor pueda colocar el automóvil correctamente en la carretera y saber qué hacer al acercarse a una curva”, añade.

Rolls-Royce habla de ganancias marginales: las pequeñas mejoras en los detalles pueden sumar mucho. Esto explica por qué Joerg se estremece con cosas como que el viento suene un poco alrededor de los espejos. "¿Pensó en cámaras en lugar de los espejos convencionales?" Pregunto. “Lo hicimos, pero no por mucho tiempo”, dice. “No son apropiados en un Rolls-Royce”.

No es perfecto, pero tampoco está terminado

Rolls-Royce Spectre

Joerg dice que el Spectre solo está terminado en un 65%. Incluso en esta etapa, este Rolls-Royce electrificado, el modelo más importante que la compañía ha fabricado desde el Silver Ghost de 1906, según Müller-Ötvös, es el automóvil más refinado que he conducido. Su ambiente, la atmósfera y la experiencia de viajar en él son diferentes a cualquier otra cosa.

Ellos buscan ganancias marginales, así que ofrezco críticas marginales. Podría haber algo más de peso en la dirección y un poco más de sensación en la parte superior del pedal del freno. El frenado regenerativo y el modo de conducción con un pedal podrían ser más significativos. Aparte de eso, es fascinante de conducir. Y se las arregla para no ser un tanque de privación sensorial. 

Los elementos del tren motriz aún son secretos

Prueba del Rolls-Royce Spectre

Rolls-Royce se mantiene firme en los detalles, pero es seguro asumir que el hardware está muy relacionado con la configuración de los BMW i7 y el iX. Esta es una buena noticia, porque ambos son brillantes. Sin embargo, Rolls-Royce, consciente de esta relación, está muy interesada en poner un poco de distancia con BMW

Por esto, el Spectre obtiene su propio software y la integración es singularmente Rolls-Royce. Su 'paso a paso' es incluso más suave que el del i7 y su calibración general es más decorosa. Además, tendrá una batería más potente, suponemos que de 120kWh, lo que lo coloca a la altura de las grandes armas eléctricas.

Por otro lado, se confirma una cifra de par de 900 Nm, pero la potencia exacta sigue siendo un misterio. Seguramente esté por encima de 600 CV, seguramente, aunque Rolls no está interesado en ningún tipo de competición de potencia.

Sobre los motores, si son los mismos que los de BMW, son síncronos estimulados eléctricamente en lugar de imanes permanentes fijos, lo que elimina la necesidad de metales de tierras raras. El software de carga siempre está mejorando, y aunque Rolls reclama una autonomía WLTP de 500 km, eso es un problema menor en este automóvil. 

El propietario promedio de Rolls tiene siete coches en su garaje, y es probable que el Spectre sea solo para ocasiones especiales. El Phantom, con su V12 de combustión, puede recorrer largas distancias. Así, es poco probable que veas a un propietario de un Spectre esperando que se libere un cargador, o comiendo una tostada de jamón y queso mientras el coche se carga. 

Su interior es satisfactoriamente analógico

Prueba del Rolls-Royce Spectre

El acceso al habitáculo de cuatro plazas se realiza a través de puertas suicida, que el conductor cierra pisando el pedal del freno. A diferencia de algunos rivales de alta gama, Rolls-Royce ha resistido la tentación de ofrecer un ataque tecnológico completo. Aquí no hay una hiperpantalla ni nada por el estilo. 

Ahora bien, hay instrumentos digitales, que hacen un excelente trabajo al verse exactamente igual que los analógicos. Hay una pantalla táctil central, a la que también se puede acceder a través de un controlador giratorio. La climatización se realiza mediante grandes mandos giratorios y los tradicionales discos rojos y azules de Rolls. Esta es una solución elegante y nunca superada. 

Junto a esto, el techo iluminado por estrellas ahora se extiende hasta las puertas y suma casi 4800 estrellas iluminadas individualmente. Además, la consola central es parte del chasis, lo que ayuda a la rigidez, por lo que aquí no hay propiedades extrañas, a diferencia de otros coches eléctricos grandes. Asimismo, los asientos son fabulosos, suntuosos pero efectivos en las curvas rápidas. 

Por otro lado, Rolls ha diseñado su propio sistema de audio monumental, optimizándolo desde el escenario inicial. Nuestro prototipo es deliberadamente bastante sombrío por dentro, pero en la división a medida de Rolls, todo es posible. Se planea crear incluso un nuevo taller de pintura en los próximos años, junto con una instalación de producción ampliada en Goodwood. 

La prueba de grupo costará una fortuna 

Rolls-Royce Spectre

Sus rivales no son coches. Los propietarios del Rolls-Royce Spectre buscan el equivalente en cuatro ruedas de la vista desde el ático One57 en Manhattan, el superyate Project Norse o el jet privado Gulfstream G650. Veremos junto a qué figura poderosa se asienta Rolls.

Algunos podrían preferir que el nuevo Spectre sea un poco más rápido o un poco más electrizante al conducirlo. Pero eso es no entender la idea. Debemos reservarnos el juicio hasta que conduzcamos el coche terminado, pero el Spectre es una experiencia genuinamente edificante.

Etiquetas: Motor