¿Son las baterías de los coches eléctricos iguales que las de los coches de gasolina o diésel?

Batería eléctrica de un Tesla.

Gustavo López Sirvent

Aunque pueda parecer iguales, existen algunas diferencias

Posiblemente, los expertos, fanáticos y profesionales de la automoción sepan la diferencia entre las baterías de un coche de combustión interna y las de un coche eléctrico. A lo mejor, tú que no eres ni una cosa ni otra no sepas diferenciarlas. Pues te vamos a ayudar porque hay diferencias sustanciales entre ambas.

Si nos ceñimos a la de los motores de gasolina o diésel, debemos saber que son baterías rectangulares que cumplen la función de ser una fuente de energía para el vehículo para cuando el motor, y por lo tanto el alternador, se encuentran apagados. 

Son las famosas baterías de ácido y plomo, que cumplen la función de dar la energía que permite mover el motor de arranque de un coche con el que se enciende el motor.

De igual manera, gracias a esta batería, el vehículo puede usar las luces, el equipo de sonido y la climatización. Asimismo, mantiene la memoria dinámica de los controles que la necesitan y alimenta el sistema de alarma para cuando el automóvil está detenido sin tener ocupantes a bordo.

Estas baterías han demostrado ser la mejor opción de alimentación eléctrica para automóviles con motores de combustible fósil y tienen un rango de uso de entre -30°C y 70°C de temperatura. Por esa razón, en zonas muy frías, se suele elegir una batería más potente, ya que el promedio de arranque de los coches en un año es de 18°C, pero depende de dónde vivas puede bajar ostensiblemente.

Si echamos la vista atrás, y de eso no hace mucho, recordamos que era necesario hacer un mantenimiento de las baterías, que constaba de mantener siempre alto el nivel del electrolito, lo que se hacía rellenando las celdas con agua destilada periódicamente. 

En la actualidad, las baterías ya no requieren de mantenimiento alguno y además tienen una luz testigo de color verde que mantiene informado al usuario de la condición de la misma.

Baterías de coches eléctricos

Pero cuando hablamos de coches eléctricos, el tema de la batería toma otro cariz, porque a diferencia de los automóviles con motores de combustión interna, en los vehículos que se mueven con propulsores eléctricos, la batería es la que genera el mismo movimiento. 

No se encienden, sólo se activa el contacto para colocar la transmisión en marcha adelante o retroceso y se acelera para mover el vehículo. La batería de un automóvil eléctrico es lo que permite que funcione el motor, pero también todos los demás sistemas (desde las ventanillas eléctricas, la climatización, el sonido, las luces y el sistema de info-entretenimiento).

Por su diseño, estas baterías van alojadas en el suelo de los coches, el usuario no tiene acceso a ellas desde ningún sitio y tienen unos complejos sistemas de control electrónico y de refrigeración.

No hay que hacer ningún tipo de mantenimiento salvo el de controlar el tipo de carga que se les aplique, porque en función de ello, de la potencia del cargador que se use para recargarlas, dependerá la vida útil de este componente del vehículo.

Cuánto más veces se las cargue con potencia alta, menos tiempo mantendrán la eficiencia, aunque Tesla, el líder de la movilidad eléctrica, asegura que hasta por lo menos 8 años, las baterías no presentan mermas de rendimiento, y Nissan, fabricante de uno de los primeros coches eléctricos como es el Leaf, ya ha superado los 12 años sin problemas de eficiencia en sus pilas.