Comprar un BMW M4 de segunda mano es algo tentador: la primera generación del BMW M4 (con ese nombre) es un caramelo para los que buscan un coupé de altos vuelos, súper deportivo, con un diseño espectacular y un precio que ya está a la baja en el mercado de ocasión. ¿Vale la pena comprarlo? ¿O es mejor comprar un BMW M3 E92 de segunda mano? ¿Y qué me dices de un BMW M5 E60 de segunda mano con su fabuloso motor V10?

Sin duda, en el mercado de ocasión BMW ofrece algunos de los deportivos más espectaculares. El BMW M4 tiene una ventaja respecto a sus antecesores más antiguos: al ser más moderno, es un coche plenamente vigente, con tecnología al día en términos de infoentretenimiento en el interior y con un motor que, sin ser un mechero, sí es más eficiente que el V8 de M3 E92 o que el V10 del M5 E60.

¿Comprar un BMW M4 de segunda mano?

Hay dos cosas que están claras: el BMW M4 es uno de los coches deportivos más atractivos del mercado. Su motor de seis cilindros biturbo es una auténtica gozada, explosivo y estimulante a más no poder. Es un deportivo muy serio y en ese sentido nadie puede decir lo contrario. Eso es lo primero positivo. ¿Lo segundo?

Pues que el precio del BMW M4 de segunda mano ya está por debajo de la barrera psicológica de los 50.000 euros. Es decir, ya está más barato que la mayoría de compactos deportivos. Con ese dinero en el bolsillo, elegir entre un compacto deportivo o un M4 de segunda mano puede ser un auténtico quebradero de cabeza.

Siempre que hablamos de este tipo de compras, lo primero que debes tener presente es que estás comprando por 50.000 (o menos) un coche que nuevo costaba más de 100.000 euros. O casi. Es decir: el mantenimiento es alto, tanto por su consumo de gasolina como por el precio de las revisiones. Cualquier fallo de un componente de alta tecnología te puede salir por un pico.

¿Fallos en un BMW M4 de segunda mano?

Los primeros ejemplares fabricados (entre 2014 y 2015) tuvieron algunos problemas en ciertos componentes importantes. El más relevante fue un problema en el eje de transmisión, que tuvieron ciertos ejemplares fabricados en esas fechas y cuyo resultado fue una llamada a revisión. El motor es bastante fiable y no da muchos problemas: es un motor menos delicado que el V8 de M3 E92 que está derivado del V10 del M5.

Se reportan algunos fallos en ciertos materiales del interior, pero no son fallos que puedan poner en peligro la vida de tu coche. A la hora de comprar un BMW M4 de segunda mano deberás tener muy en cuenta todo el tema de elementos de desgaste, como amortiguadores, frenos, etc. Es un coche para disufrutar y mucha gente lo ha podido usar exprimiéndolo a fondo.

Por lo demás, en general es un coche bastante nuevo y por pura juventud todavía no se han reportado fallos graves. Sí es recomendable comprar un ejemplar de 2016 en adelante y con no más de 100.000 kilómetros. Y como siempre digo en este tipo de coches, asegurarte que el mantenimiento ha sido absolutamente escrupuloso, ¡hasta el extremo!

No te olvides que es un coche exigente

El BMW M4 es uno de los coches más exigentes del mercado. No es broma. No es como comprarte un coche potente y ya está, es un coche que requiere de ciertas manos y cierto cuidado con lo que se hace. Si te gusta correr pero consideras que tu nivel de conducción no es experto, te recomiendo otros coches como el Audi RS3, con unas prestaciones similares y un manejo mucho más agradable.

Si finalmente te decantas por él, yo te recomiendo hacer algún curso de conducción: la propia marca organiza eventos donde podrás mejorar para sacarle todo el partido al coche. Personalmente, el BMW M4 es uno de los deportivos que más me han gustado, ya que además de su aspecto espectacular y su interior práctico, tiene un comportamiento deportivo y sin concesiones. Duro y emocionante: ¡ponle el sistema de escape deportivo M Performance y prepárate para disfrutar como un enano!