El configurador del Shelby GT500 2020 es lo mejor que vas a ver hoy si cada noche antes de pillar el sueño te imaginas recorriendo las carreteras norteamericanas a bordo de un ‘muscle car’ pata negra con 770 CV bajo el capó. El Ford Mustang más radical no está disponible en nuestro mercado, pero por una módica cantidad, siempre puedes pillar un avión, cruzar el charco, ir a concesionario, comprarlo, hacer los papeles de exportación, cargarlo en un barco y matricularlo en España. Fácil y para toda la familia.

Bueno, vale, lo reconozco, es un poco coñazo, pero te aseguro que por menos de 100.000 euros no encontrarás un coche igual en el mercado español. Ni tan salvaje, ni tan espectacular estéticamente ni tan exclusivo. Y es que pocos se atreven a empezar una aventura de tal calibre.

El configurador del Ford Mustang Shelby GT500 no podría ser incluido entre los mejores configuradores de deportivos, ya que es bastante sencillo en sus opciones, sin embargo, es interesante poder jugar con los colores y con las diferentes opciones de llanta, de rayas o de fibra de carbono. ¡Ojo que si empiezas a abusar de este ligero y caro material el precio puede llegar a superar los 100.000 dólares!

Y es que si optas por las rayas pintadas de manera artesanal en la propia carrocería, en lugar de apostar por vinilos, el capricho te costará 10.000 dólares. Si quieres instalar todo el kit de fibra de carbono exterior, que incluye llantas, labio frontal, faldón lateral o alerón trasero, la broma sube hasta los 18.500 dólares. Eso sí, incluye el ‘Track Pack’ con elementos tan interesantes como los neumáticos Michelin Pilot Sport Cup o los asientos bucket firmados por Recaro.

El Handling Pack cuesta otros 1.500 dólares, la funda para el coche, personalizada, 395 dólares, aunque los más sibaritas y amantes de la tecnología, seguro que eligen el ‘Technology Package’ por 3.000 dólares, incluye el sistema de detección de ángulo muerto, sistema de navegación con función de voz o un sistema de audio firmado por Bang&Olufsen.

En definitiva, que si te pones sibarita, podrás gastarte más de 100.000 dólares en un Shelby GT500 2020, pero ojo, porque a cambio te llevas un coche absolutamente espectacular, cargado de fibra de carbono, imponente en cuanto a prestaciones o comportamiento dinámico y súper exclusivo en el Viejo Continente. ¡Lo tiene todo!