El nuevo acabado interior de Lamborghini que vale lo mismo que un Golf GTI

Lamborghini Aventador Neidfaktor
Si preguntas el precio es que no te lo puedes comprar.

Este interior Neidfaktor del Lamborghini Aventador S es una auténtica pasada, un lujo cuyo precio está al nivel de un compacto deportivo. Ahora bien, antes de deprimirnos con su coste, vamos a deleitarnos con lo que ofrece: pequeños detalles que pueden marcar la diferencia a la hora de configurar nuestro nuevo Lamborghini.

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Y es que no hay duda que el Lamborghini Aventador es uno de los coches deportivos más alucinantes que puedes comprar. Su motor V12 atmosférico es una auténtica orgía para los sentidos, tanto por la manera brutal de entregar la potencia como por el sonido que emite. El interior también es muy racing: todos los ingredientes que tiene que tener un superdeportivo, a la vieja usanza.

Sin embargo, en estos coches saber configurar los pequeños detalles es clave para poder dotarles de personalidad y buen gusto. Esto es algo que en España no se valora demasiado entre los millonarios, pero en otros mercados es clave. Por eso, departamentos como Lamborghini AD Personam o Ferrari Tailor Made cada vez son más importantes para las marcas de lujo.

Este Lamborghini Aventador S cuenta con un interior desarrollado por el especialista Neidfaktor. Un interior tapizado mayormente con alcántara negra, pero con pequeños detalles que son los que marcan la diferencia. Los tonos blancos se encuentran en las costuras especiales, tanto en el asiento como en las puertas. También forman una línea de color de contraste tanto en el borde de los asientos como en el centro de los mismos y en el salpicadero.

Lamborghini Aventador Neidfaktor

Pero lo que terminando poniendo el toque distintivo clave es el tono naranja en la parte central del salpicadero y en el volante, combinado a la perfección con las pinzas de freno en el exterior. Sí, así es, los dos colores protagonistas en el exterior se ven perfectamente reflejados en el interior, consiguiendo una combinación de color espectacular.

Hasta aquí, todo precioso. Está claro que quien se gasta más de 400.000 euros en un coche no tiene problemas en gastar algo más para dejarlo estéticamente impecable, derrochando buen gusto por las esquinas. Sin embargo, para el resto de mortales, las cifras que se manejan, pues asustan: sí, unas costuras en color blanco y detalles en el salpicadero cuestan la friolera de entre 36.000 y 38.000 euros. Sí, lo que te cuesta un Seat León Cupra o un Volkswagen Golf GTI. ¡Migajas para quien puede comprarse un Lamborghini!