Seguro que el propietario de este Porsche 356 accidentado jamás pensó que su coupé acabaría siendo un roadster, pero Emory Motorsport tenía la mejor solución para este Porsche al que han apodado 1959½, dado que el mayor daño que sufría su carrocería estaba en el techo.

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“Teniendo en cuenta que el techo no se podía reparar, nos dejó un gran lienzo para desarrollar un auténtico y único Porsche 356 'Outlaw' que se hace eco de todo lo que los entusiastas adoran de los Speedsters de la época”, explica Rod Emory, fundador de la compañía preparadora (¿se atreverá algún día a hacer algo con el Porsche Taycan?). 

Así que en lugar de tener un Porsche 356 para el desguace, ahora podemos disfrutar de un Porsche 356 Speedster exclusivo de tan solo 839 kg de peso. Además, aunque el coche original montaba un motor de 1.6 litros, pero en este se ha cambiado por un 2.4 litros así que es de esperar un salto en el rendimiento… y una bomba de sensaciones por encima de muchos coches deportivos si tenemos en cuenta lo que marca la báscula.

También Emory ha metido mano a la suspensión, que ha sido actualizada añadiendo amortiguadores regulables Koni, y hay un set de ruedas Dunlop que abrazan las llantas de Tecnomagnesio de 15 pulgadas. La verdad, comparado con el resto de creaciones de este preparador, este Porsche 356 luce modesto.

Se le ha dado un acabado minimalista, con una pintura en color Aguamarina metalizada y, rompiendo la sobriedad, se han pintando a mano los logos de Mobil Pegasus. Y en el interior, más de lo mismo: ya sabes lo que dicen, ¡menos es más!

“Los entusiastas de Porsche se habrán dado cuenta de que no lleva el emblema ‘Speedster’”, añade Rod. “Esto es un guiño a los inicios del coupé y a la idea de que rendimos homenaje a lo mejor que tenía ese coche antes de encontrarlo”. Entrañable.

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