El Renault 11 Turbo es un gran coche. No solo lo fue, sino que todavía lo es. El compacto deportivo que tuvo Renault en la década de los '80 es un 'youngtimer' de lo más atractivo. No te voy a decir que es uno de los mejores coches deportivos clásicos que puedes comprar, ni mucho menos. Es uno de tantos. De tantos modelos, porque lo que son unidades de este tipo de vehículos, van quedando más bien pocas. Y eso, querido amigo y amante de los coches, es una de las cosas que tan especial le hacen. Entre muchas otras.

Renault 11 de segunda mano. ¿Por qué es tan recomendable?

Para empezar, y como acabo de contarte, cualquier coche que tenga una pila de años a sus espaldas y algo especial (unidades limitadas, un buen motor para su época, un comportamiento divertido, un acabado exclusivo, etc), es una buena inversión. Los ejemplares del Renault 11 Turbo que siguen a la venta son muy pocos, y si quieres uno que esté en buen estado será todavía más difícil que encuentres uno que te satisfaga. Por dos razones principales: lo primero es que son mucho más caros, y lo segundo es que escasean a base de bien.

Ahora mismo las unidades del Renault 11 Turbo a la venta en España casi puedes contarlas con los dedos de una mano. Y si quieres uno que funcione en cuanto gires la llave, y sin ninguna tara demasiado preocupante, ya puedes preparar varios miles de euros. ¿Lo bueno? Es un coche que disfrutarás, porque tiene el encanto de todos esos hot-hatches ochenteros (a pesar de que era bastante más racional que algunos de sus principales rivales) que conseguían hacerte estremecer sin necesitar grandes dosis de potencia bajo el capó.

Porque el principal objetivo de la firma del rombo para con este coche era crear un modelo que fuese rápido, pero también noble, estable, fácil de conducir, que tuviese un precio contenido y cuyo mantenimiento no fuese prohibitivo. En resumen, racionalidad aderezada con un extra de CV. Eso sí, si te apetecía buscarle las cosquillas a su propulsor 1.4 de 105 CV también te lo permitía. Pero claro, tampoco es algo muy complicado teniendo en cuenta que el peso total del conjunto eran unos 900 kg. Además, durante los sucesivos años la potencia aumentó hasta los 115 CV. Casi 128 CV por tonelada. Nada mal, ¿no?

Por último, otra cosa muy buena del Renault 11 Turbo es que si te acabas decidiendo por uno, por muy caro que te cueste, permíteme que dude que baje de valor si sabes conservarlo bien. Es decir, lo compras, lo disfrutas y, cuando te canses de él, si es que lo haces, lo vendes por más de lo que te costó. Yo lo veo un win-win de manual.