Cuatro reglas de oro para conducir en carreteras heladas

Audi eTron GT conducción invierno en nieve o hielo

Noelia López

Estos los días los termómetros han bajado en toda España de manera notable. Todo apunta a que lo harán todavía más; incluso hay quien habla de que a finales de esta semana llegará una nueva Filomena. Quizá no sea para tanto pero no está de más recordar las cuatro reglas de oro para circular en carreteras heladas, según nos cuentan en BlaBlaCar.

Planificar la ruta en coche con antelación 

Como en casi todo en la vida, la clave antes de iniciar un viaje en invierno es consultar la previsión meteorológica a través de plataformas como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). 

Si las previsiones apuntan a fenómenos como nieve, lluvia o niebla, a la hora de planificar la ruta es más seguro utilizar las vías principales (autopistas y las autovías), ya que suelen estar en mejor estado y cuentan con más vigilancia.

Para esto, resulta muy útil aprovechar herramientas como el mapa de tráfico de La DGT, que ofrece constantes actualizaciones en los que se puede comprobar, entre otras cosas, la disposición de las carreteras y ver qué tramos están bloqueados por la nieve o requieren el uso de cadenas y neumáticos de invierno.

Llevar el coche preparado y equipado para cada situación 

Una vez se conozcan y se hayan tomado las precauciones en relación al estado de climatología y de las carreteras, es muy importante llevar el coche bien preparado. 

Sin necesidad de llegar al extremo de aquél kit de emergencia recomendado por la DGT que levantó la polémica hace años; sí es importante contar con una serie de elementos que pueden hacer las cosas mucho más llevaderas en caso de accidente o atasco kilométrico.

En este sentido, antes de comenzar el viaje es más importante que nunca asegurarse de que sales con  el depósito lleno y hacer una buena revisión de los neumáticos. Comprobar el estado de elementos como los frenos o del anticongelante son otras recomendaciones básicas.

colocar cadenas nieve

También es importante (mucho) disponer de cadenas de nieve o cambiar las ruedas para contar con unas de inverno, así como limpiar el guardabarros de las ruedas delanteras y la nieve del parabrisas con los instrumentos necesarios, como cuchillas, rascadores, cepillos y palas.

Precauciones para una conducción segura

  • Velocidad algo más baja de los habitual, especialmente en zonas en las que es necesaria mayor precaución, como curvas, tramos inclinados, carreteras de doble sentido, puertos, zonas de montaña, etc. 
  • Evitar maniobras bruscas
  • Respetar la distancia de seguridad, que debe aumentar un poco al circular con condiciones como la lluvia, el granizo, la nieve o la niebla
  • Parar a descansar en áreas de servicio o zonas habilitadas en las carreteras hasta que las condiciones de climatología mejoren y se reduzcan los riesgos.
Carretera con nieve

Prevé todo lo necesario por si hay que estacionar el vehículo

Si se llega a una situación en la que lo más seguro es estacionar el vehículo en vías bloqueadas por la nieve para retomar el trayecto una vez que mejoren las condiciones, es esencial disponer de elementos que nos permitan pasar ese tiempo en el coche de la mejor manera posible. 

Será de gran ayuda si has lo suficientemente precavid@ y llevas mantas y ropa de abrigo. Es fundamental también que el teléfono móvil esté bien cargado, así como disponer de cargadores o baterías adicionales.

Además para estos viajes es recomendable contar con suministros de agua, alimentos, un botiquín de primeros auxilios e, incluso, unas pinzas para poder arrancar el coche en caso de que la batería de éste se agote.