En el Grupo Volkswagen podemos optar por distintos SUV. Tres de ellos son el Cupra Formentor, el Volkswagen Tiguan y el Skoda Kodiaq, que están orientados a distintos tipos de público. Los tres pueden parecer coches diferentes, pero lo cierto es que son más similares de lo que parece. Esto es lo que tienen en común.

Para empezar, su primera coincidencia tiene que ver con su fabricación, ya que estos tres modelos están construidos sobre la plataforma MQB del grupo automovilístico. Esto tiene una repercusión entre las medias de estos tres todocaminos, que son en ocasiones parecidas entre sí.

Misma plataforma, pero distinto enfoque

Por ejemplo, tanto el Volkswagen Tiguan como el Cupra Formentor miden 1.839 mm de ancho, aunque el Skoda Kodiaq sube a 1.882 mm. La longitud también es similar entre el de Wolfsburgo y el español, con 4.509 mm y 4.450 mm, respectivamente. En el caso del Tiguan Allspace, eso sí, la longitud aumenta hasta los 4.701 mm, situándose más cerca de los 4.697 del Kodiaq.

Por otra parte, si nos fijamos en la batalla de cada modelo, también hay parecidos. El Volkswagen tiene 2.678 mm y el Cupra le supera por poco con sus 2.680 mm. Sobre el Skoda, al igual que antes, sus 2.791 mm de batalla solo están cerca de las medidas del Tiguan Allspace, con 2.790 mm.

Coincidencias mecánicas

Sea como fuere, donde no hay parecidos, sino coincidencias irrefutables, es en el aspecto mecánico. Todos estos modelos ofrecen motores específicos, pero también comparten algunos bloques entre sí. Un ejemplo claro es el 1.5 TSI de 150 CV, así como el 2.0 TDI con la misma cifra de potencia. 

Te interesa: Probamos el Cupra Formentor de 150 CV

Por otra parte, en el caso de las versiones más prestacionales, podemos encontrar en estos tres modelos un motor 2.0 TSI, pero que ofrece distintas cifras de potencia. En el Formentor y el Kodiaq podemos encontrarlo con una potencia de 245 CV, aunque el español también cuenta con una variante de 310 CV. Asimismo, el Tiguan R monta también el 2.0 TSI, pero con 320 CV.

Finalmente, también encontramos otro punto en común entre el Volkswagen y el Cupra, ya que ambos cuentan con alguna versión híbrida enchufable. En concreto, los dos modelos cuentan con una versión con un motor 1.4 y una potencia total 245 CV. Además, en sendos casos se asocia este bloque a un cambio DSG de 6 velocidades.

Por lo tanto, parece que estos tres modelos tienen más en común de lo que cabría esperar, aunque no es algo extraño, dado que pertenecen al mismo grupo. Aun así, más allá de esas coincidencias, cada uno cuenta con un estilo muy diferente que pensado para apelar a las necesidades de cada usuario.