La gymkhana campestre de un Nissan Patrol 'travestido' en una VW T2

Mastermilo, un Patrol carozado con VW Van

Javier Prieto

Al margen de su hilarante estética, el trasto lleva su curro

Los eclécticos y cachondos simpáticos genios de Mastermini, nos ofrecen una nueva entrega de sus hilarantes vídeos automovilísticos. En esta ocasión la aventura del amigo Martijn va de realizar un test drive algo fuera de lo común... por el vehículo protagonista. Se trata de un engendro mecánico, una especie de chatarra andante a medio camino entre un Transformer oxidado y un coche de Mad Max. El imaginativo neerlandés tomó un anciano Nissan Patrol y reemplazó su carrocería original por la de una cochambrosa Volkswagen T2 de alguna antigua patrulla de policía. El resultado ya te lo puedes imaginar. A pesar de todo, el artefacto rodante consigue moverse con (cierta) soltura por unos caminos embarrados en medio de un bosque.

Y aunque sus prestaciones off-road dejan (bastante) que desear, nos ha sorprendido que no se desmontara en mil pedazos a las primeras de cambio. Pero espera que hay más. En varias escenas, el Nissan Patrol con cuerpo de una Volkswagen, lo da todo incluso chapoteando en una ciénaga. No te pierdas cómo salió tuvo que ser rescatado de esa prueba anfibia.

Describir el, por llamarlo de algún modo, habitáculo del trasto resulta prácticamente imposible. Al respecto, solo te diremos que el motor está al descubierto y en la parte delantera del habitáculo, mientras que el puesto de conducción se encuentra en la mitad del mamut. A partir de ahí, te recomendamos ver las secuencias. No queremos despedir esta crónica de la gymkhana campestre del todoterreno Frankenstein sin referirnos al padre de la criatura. Hay que tener mucho tiempo libre, cierta habilidad y mucho valor para crear semejante cachivache.