A estas alturas es imposible que no hayas oído hablar del plan de ahorro energético, por aquello de quitarse la corbata, bajar la temperatura de la calefacción a 19º C y subir la del aire acondicionado a 27º; o lo de apagar las luces de los escaparates... Todo, con tal de ahorrar. 

Y todo suena muy lejano al mundo de los coches, pero debes saber que hay un nuevo impuesto del Gobierno que subirá el precio de los coches. Ya se ha hablado de reducir la velocidad en las carreteras, incentivar el uso de la bicicleta e, incluso, del domingo sin coches. De hecho, en su día el Gobierno hizo tres recomendaciones a la DGT para reducir el consumo energético derivado del tráfico. 

Pero nada hacía pensar que el plan de ahorro energético afectaría directamente al precio de los coches por un nuevo impuesto asociado a los equipos de aire acondicionado.

El cambio llega ya, concretamente, a partir del 1 de septiembre, cuando habrá una subida de impuestos vinculada a la Ley 14/2022, la conocida como Ley de ahorro energético. La clave está en un apartado en el que se especifica lo siguiente:

"Se encarecerá entre un 5 y un 10% el precio de los equipos de refrigeración, lo que incluye a los aires acondicionados, equipos con bomba de calor o electrodomésticos. Y eso incluye los que van instalados en los coches".

En realidad es una reforma del impuesto de gases fluorados que ya existía previamente, pero hasta ahora solo repercutía a aquellos que vendían directamente dichos gases fluorados al consumidor final. 

Con esta nueva Ley, más allá de la limitación del uso del aire acondicionado en edificios públicos y espacios comerciales, se verán afectados todos los sectores que venden este tipo de aparatos de calor y frío, independientemente de su función. Así que los vehículos están incluidos.

Según la Asociación de Empresas del Frío y sus Tecnologías (AEFYT), este nuevo impuesto se aplicará en la fabricación e importación de estos nuevos equipos de refrigeración. Esto no solo afecta a los aparatos de aire acondicionado que puedas montar en tu propia casa o comercio, si es que tienes un negocio, sino también en los coches que se fabriquen y vendan a partir de este momento.

Y no solo en las ventas, sino también en las reparaciones de vehículos que afecten al sistema de climatización. Sí, si el aire acondicionado de tu coche deja de enfriar y tienes que recargar el gas. Desde ahora será más caro.

Y no deja de ser irónico, porque esta reforma también afecta a los sistemas con bomba de calor, un elemento especialmente importante en los coches eléctricos que verán incrementado (todavía más) su precio. Y si lo que se quiere es descarbonizar el parque móvil, encarecer los coches destinados a hacerlo no parece la mejor opción para lograrlo...