¿Es el Peugeot Rifter GT Line un coche recomendable?

Además, en carretera, va muy bien
A priori parece una furgoneta de reparto, ¿vale la pena apostar por él?

Se llama Peugeot Rifter GT Line y es uno de los coches nuevos más curiosos que puedes comprar en el mercado. ¿Por qué digo esto? Pues porque en los últimos años el mercado de las furgonetas ha evolucionado en dos sentidos: uno se mantiene como el aliado de albañiles, fontaneros o repartidores de mercancía. Por otro se ha transformado en un turismo con muchos atractivos para las familias.

Y es precisamente en este segundo grupo donde se engloba el Peugeot Rifter GT Line, la versión más equipada, más chula estéticamente y con un comportamiento dinámico más emocionante de toda la gama. Su nombre ya lo deja claro: hablamos de un turismo pensado por y para las familias, no para el trabajo de cada día.

¿Vale la pena apostar por el Peugeot Rifter GT Line?

Hay dos cuestiones que debes entender para conocer la respuesta. La primera es que la necesidad pura y simple de espacio y elementos prácticos para una familia sigue siendo una demanda real. La segunda es que las marcas han convertido a estas furgonetas en turismos con un alto grado de refinamiento, equipamiento e imagen. 

El salpicadero está lleno de tecnología y el habitáculo, de huecos
El salpicadero está lleno de tecnología y el habitáculo, de huecos

Por lo tanto sí, la respuesta es sí. A nivel práctico, el Peugeot Rifter es un coche súper interesante. Con cada vez menos monovolumen en el mercado y la fiebre SUV, este tipo de vehículos se convierten en los coches más prácticos del mercado: asientos individuales, un maletero de 600 litros de capacidad en apenas 4,40 metros de largo y unas puertas correderas traseras súper útiles.

Y a nivel de refinamiento y comportamiento dinámico, esta Peugeot Rifter GT Line ha evolucionado muy bien. Lo más importante es que se basa en la plataforma EMP-2 que comparte con el Peugeot 3008 y con otros turismos del Grupo PSA. Es decir, la base es de un turismo convencional y eso se transmite en un comportamiento de primer nivel.

El coche para las familias

Eso sí, para las familias que quieren practicidad, economía y sin querer ser 'fashion victims' ni seguir las reglas del mercado a raja tabla. El Peugeot Rifter GT Line cuenta con dos motores diésel pensados para ahorrar: uno de 100 CV con un consumo medio de 5,5 litros y otro de 130 CV con un consumo idéntico. Ambos son interesantes pero por la diferencia de precio optaría por el de 130 CV.

El espacio para la carga no tiene parangón
El espacio para la carga no tiene parangón

Así pues, podemos decir que este Peugeot es una alternativa muy real para las familias que busquen espacio, practicidad y las comodidades de un turismo. Eso sí, el único problema es que tendrán que soportar al cuñado de turno diciendo que se han comprado una furgoneta para llevar los melocotones. Bueno, tampoco parece un precio muy alto a pagar. 

Y es que el precio del Peugeot Rifter GT Line es otra de las grandes ventajas. La versión de acceso está disponible desde 22.644 euros, mientras que la de 130 CV cuesta 23.892 euros. Sin descuentos, por lo que en la práctica no será difícil encontrarla por debajo de los 20.000 euros. Ningún otro coche te da tanto espacio por tan poco dinero.