Este es el primer coche de calle de Dallara. Lobo con piel de cordero

Vale, venga... nos habéis convencido. Vamos a darle una oportunidad.

Hoy es un día importante porque hemos conocido el primer coche de calle de Dallara. Si, así es… El popular fabricante italiano en el mundo de la competición ha presentado el Dallara Stradale, un modelo que pretende ser simple y auténtico.

“Me gusta pensar que Colin Chapman, al cual empecé a admirar desde los días de su Lotus Seven, apreciaría la esencia y simplicidad de este coche”, afirma Giampaolo Dallara, presidente de Dallara Automobili. Escuchar esto hoy en día es excepcional, sobre todo teniendo en cuenta la complejidad de las reglas e incluso el hecho de cambiar de carril con los coches modernos suponga involucrar 17 ordenadores y un proceso de energía propio más bien de las misiones lunares. No exagero… 

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“Este proyecto añade todo lo que hemos aprendido en la competición”, explica Dallara. Y eso es bastante, en caso de que no lo sepas, pues la compañía tiene 45 años de experiencia en los circuitos, en los que se incluye el desarrollo de chasis y la producción para cada Fórmula, así como para la IndyCar o Daytona. En cuanto a los coches de calle, tampoco es que a Dallara todo esto le pille de nuevas, pues tiene algo que ver con el Maserati MC12, el KTM X-Bow y ¿sabías que se encargó del chasis del Bugatti Chiron? Así que el Dallara Stradale tiene buenos cimientos para sus coches nuevos

Sin embargo, a pesar de ser un coche de calle, es especial. No hay techo y tampoco puertas para acceder a él. Pero la parte más interesante es que el Dallara Stradale que ves en la galería solo es una de las configuraciones posibles, porque tú podrás personalizarlo de la manera que quieras. Puedes convertir esta 'barchetta' en un roadster añadiéndole un parabrisas, por ejemplo o crear un coupé. Habrá también una suspensión ajustable, un cambio manual robotizado y un alerón trasero. Viene completito.

Por último, pero no menos importante, hablemos de cifras. El primer coche de calle de Dallara pesa 855 kg, “gracias al uso extensivo de compuestos y fibra de carbono”, genera 820 kg de carga aerodinámica y más de 2g en las curvas. De moverlo se encarga un motor con supercargador de cuatro cilindros y 2,3 litros, que ofrece ni más ni menos que 400 CV. 

Con esto, se espera que acelere de 0 a 100 km/h en 3,25 segundos y que alcance una velocidad máxima de 280 km/h. Del ABS y del control de estabilidad se encarga Bosch; de los neumáticos, Pirelli. ¿Todavía no te ha convencido? Seguro que sí…