En los próximos años está previsto que asistamos a una auténtica revolución en el automovilismo. Las normativas de varios países contemplan en unos pocos años el cese de las ventas de los vehículos de combustión, a la vez que favorecen las de los coches eléctricos. En el caso de Suecia, se estableció el año 2030 como fecha para la prohibición de la venta de coches con motores térmicos, al igual que en otros territorios de la Unión Europea. Sin embargo, un estudio reciente apunta al año 2025 como momento clave para dar este paso en ese país.

Se trata de la conclusión de una investigación realizada por el investigador Johannes Morfeldt de la Universidad Tecnológica de Chalmers, en Suecia. Tal y como se ha publicado en la revista científica Transportation Research, sería conveniente hacer efectiva la prohibición de la venta de coches de combustión cinco años antes de lo previsto para así reducir notablemente las emisiones de dióxido de carbono en el país.

El análisis desarrolla que con la situación actual sería complicado alcanzar los objetivos de emisiones fijados para el año 2030, dada la vida útil de los vehículos que ahora se encuentran en circulación y la de los que sean vendidos hasta que se lleve a cabo la prohibición. Por lo tanto, se señala que sería necesario adelantar esa fecha o, de lo contrario, incrementar el uso de biocombustibles en los modelos de combustión para reducir su impacto medioambiental.

Reducción de las emisiones en la fabricación de baterías

De esta forma, el documento apunta que sí se podrían lograr los objetivos fijados en el territorio. No obstante, agrega que también se deberá tener en cuenta el nivel de emisiones de CO2 que se produce como resultado de la fabricación de las baterías de los coches eléctricos, ya que se vería aumentado con el previsible incremento de sus ventas. La investigación considera que estos procesos mejorarán con el paso de los años y señala que las emisiones promedio resultantes de ello podrían quedar reducidas unos dos tercios por kW/h en 2045. Sin embargo, será algo que solo dependerá del nivel de mejora que se lleve a cabo.

De prohibirse la venta de modelos de combustión en Suecia en 2025, el estudio apunta que las emisiones del ciclo de vida del parque automovilístico se reducirían de los 14 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono registradas en 2020 hasta un máximo de 5 millones de toneladas métricas en 2045. Es en ese año cuando los objetivos de Suecia establecen que sus emisiones de gases de efecto invernadero deberían ser nulas, por lo que es probable que se estudie la posibilidad de acelerar este proceso de transición al vehículo eléctrico, y quizás otros países contemplen llevar a cabo una actuación similar. ¿Viviremos antes de lo previsto el fin de los coches de combustión?