Radford Type 62-2: así es el primer modelo de la marca de Jenson Button
Se construirán 62 unidades
Hemos hablado en varias ocasiones de Radford, la compañía de Jenson Button que iba a regresar al automovilismo varias décadas después para traernos coches enfocados en el disfrute de la conducción. Pues bien, este regreso ya se ha hecho oficial con el primer modelo de la marca: el Radford Type 62-2.
Se trata de una reinterpretación del Lotus Type 62 de los años 60 y es una obra realizada en colaboración con la propia Lotus, la cual ha ayudado a proveer la última tecnología para este modelo. Solo se fabricarán 62 unidades.
Por ahora solo podemos disfrutar de estos renders, pero ya conocemos algunos detalles de este modelo. Contará con una estructura de aluminio y paneles de fibra de carbono que ayudarán a mantener el peso por debajo de los 1.000 kg y algunos aspectos se compartirán con modelos de Lotus.
Es el caso del motor V6 de 3,5 litros sobrealimentado que montará y que compartirá con el Emira, el Evora y el Exige. Se colocará en posición central y se asociará a una caja manual de seis velocidades -o a una de doble embrague y siete relaciones- para transmitir “una sensación mecánica sin adulterar”.
Por dentro, sencillez y toques retro
Por su parte, el interior cuenta con un estilo peculiar, en el que se mezcla la configuración propia de un coche de competición con algunos detalles retro. Vemos cómo la fibra de carbono inunda todo el habitáculo, que se presenta en color negro.
Encontramos dos asientos de tipo bucket, frente a los cuales se sitúa un volante deportivo de tres radios y una pantalla de instrumentación digital. Se puede ver también la palanca de cambios, que se extiende hacia una posición más alta para facilitar su alcance, así como un freno de mano clásico y no eléctrico.
En cuanto al equipamiento, encontramos los elementos justos. No veremos comodidades típicas de un coche premium, sino solo lo necesario. Eso sí, se ha incluido un soporte para móvil por si necesitamos utilizar el navegador, así como un climatizador.
Finalmente, un toque que llama especialmente la atención son los dos relojes situados en el salpicadero. Se trata de un reloj y un cronómetro de marca de lujo Bremont, con un estilo clásico que combina con el estilo general del coche.
Tres especificaciones disponibles
En cualquier caso, el Radford Type 62-2 tendrá mucho más que ofrecer y para ello se han creado distintas especificaciones que podrá elegir cada cliente. Son las siguientes y cada nombre tiene asociada una decoración concreta, aunque la más básica se compone de un color, sin diseños añadidos:
- Classic: con un V6 de 435 CV, cambio manual, sin alerón y llantas de 17” delante y 18” detrás.
- Gold Leaf: con un V6 de 506 CV, cambio automático de doble embrague, dos alerones de cola de pato, llantas de 18” y 19” pulgadas con tuerca central y control de tracción de competición.
- JPS: con un V6 con un sobrealimentador mejorado para rendir 608 CV, cambio automático de doble embrague, kit aerodinámico y llantas y frenos de carbono.
Como podéis ver, este coche llegará para ofrecer unas sensaciones de conducción del siglo XXI, sin dejar de lado parte del encanto del siglo XX. Lo mismo sucede con su diseño, marcado por varios detalles retro como el diseño de las puertas, que se adentran en el techo como en el Ford GT40.
Esto se combinará con otros detalles más modernos como los espejos, que serán sustituidos por cámaras. Y es que la tecnología jugará un papel importante, razón por la cual podremos contar con suspensión delantera regulable en altura electrónicamente o un sistema de audio con Bluetooth.
Según Jenson Button: “Crear un coche que fuera a la vez lujoso, cómodo y excelente para conducir, era un desafío difícil, pero el primer Radford de la era moderna lo cumple". Tal y como apunta, “el chasis exhibe todas las características de un coche de carreras bellamente configurado para la carretera, lo que le brinda al conductor la confianza para obtener el máximo disfrute en cada viaje".
En definitiva, este coche promete ser toda una delicia para los que disfruten con la conducción, aunque solo 62 afortunados podrán comprobarlo. Cada uno de los coches se fabricará personalmente para cada dueño y cada propietario podrá disfrutar de un día de circuito con el propio Button para aprender las características generales del coche. Toda una experiencia sobre ruedas.