Con los coches, a menudo son las historias las que les dan vida. Lo sabemos bien los aficionados a los clásicos cuando tenemos alguno: te haces a sus formas y a sus manías como si de una persona se tratase. A veces, incluso parecen proceder de un mundo diferente al nuestro.

Es el caso de los coches que ha imaginado el diseñador Fabian Oberhammer, aunque está claro que es complicado que varios de los que estén leyendo esto sean los dueños de cualquiera de los superdeportivos que aparecen en estas imágenes.

Oberhammer se ha inspirado en la estética del videojuego The Last Of Us para su último proyecto, imaginando un mundo donde lo exótico se ha dejado en el olvido.

Sin duda es una idea inquietante, pero no se puede criticar la ejecución: tienes que mirar las imágenes varias veces y con atención para apartar de tu cabeza que los deportivos abandonados que ven tus ojos son en realidad imágenes creadas por ordenador.

Fabian partió del concepto 'barn find' y lo extrapoló a los "coches del uno por ciento", esos modelos que solo están al alcance de una inmensa minoría: Bugatti, Pagani, Lamborghini, Ferrari y Rolls-Royce que aparecen aquí en angustiosos estados de abandono. 

De repente, ese 'Ford Cortina encontrado en granero' no funciona de la misma manera que un Huayra abandonado que descansa bajo un garaje invadido por la naturaleza.

"La visión era básicamente hacer obras de arte de superdeportivos e hiperdeportivos olvidados y deteriorados que no solo son terriblemente caros, sino también bastante nuevos", nos contaba Fabian.

"Tan nuevos que es casi imposible que se vean así". Quería combinar el surrealismo evidente con ese toque de "espera, ¿eso es real? No puede ser. ¿O sí?". Hay quien piensa que es lo que va a ocurrir con todos estos modelos si se prohíben los motores de combustión en algún momento en el era de los coches eléctricos.

"Me gustaría mantener la interpretación abierta a cada espectador individual. Eso es lo que los hace tan interesantes. Algunas personas piensan que es real, algunos quedan impresionados por el realismo, algunos tratan de averiguar dónde están abandonados e incluso se ofrecen a comprármelos". 

"Los hay que dicen que esto es una mirada al futuro de los motores de combustión. Me encanta ver todas estas teorías diferentes. Y el pilar principal de estos renders es simplemente, que me encantan los coches".