¿Qué tiene el Ford Bronco? Su historia, a través de sus generaciones

Galería: nuevo Ford Bronco

La historia a través de sus generaciones

Ford ha recuperado a uno de sus todoterrenos más aclamados en los Estados Unidos: el Bronco. Llegará al mercado norteamericano, donde el coche cuenta con una gran popularidad, pero para los que nos encontramos al otro lado del charco, puede ser todo un desconocido. ¿Quieres conocer su historia? 

Primera generación (1966-1977)

En unos años marcados para la marca estadounidense por el lanzamiento del Mustang, un modelo icónico y mundialmente conocido que aún se mantiene en producción, surgió la idea de crear un coche todoterreno y ahí nació el proyecto. Paul G Axelrad fue el ingeniero que lo lideró, dando lugar a un coche con muchas virtudes.

Era simple pero efectivo y su objetivo era superar al Jeep CJ-5, aunque todos sabemos que Jeep es uno de los grandes en el mundo ‘off-road’. De serie, su equipamiento incluía un cambio manual de tres velocidades que se operaba desde la columna de la dirección y tracción a las cuatro ruedas, pero de manera opcional se podía añadir una radio CB, pala quitanieves y un eje de transmisión que permitía utilizar material agrícola.

En cualquier caso, las ventas se quedaron en unas 25.000 unidades al año, menos de lo esperado si bien no era una cifra catastrófica. En 1973 se añadieron opciones como la caja de cambios automática, pero seguía siendo un coche puramente todoterreno en el que reinaba la simpleza incluso a la hora de fabricarlo.

Ford Bronco primera generación

Segunda generación (1978-1979)

Sí, el sucesor del Bronco original no tuvo una vida tan larga en el mercado. La crisis del petróleo de 1973 hizo estragos en el automovilismo norteamericano, y es que la falta de gasolina no combina bien con los coches que hacen un gasto más elevado de carburante.

Aquello asustó a Ford, que tenía pensado lanzar la segunda generación de este todoterreno en 1974. Era un coche mucho más grande y pesado que su antecesor, con un motor V8 de 5,8 litros bajo el capó, y en aquel momento los utilitarios de importación empezaban a ganar popularidad entre los estadounidenses. Así, el nuevo Bronco salió al mercado en 1978 y, contra todo pronóstico, vendió cuatro veces más unidades por año que la primera generación.

Ford Bronco segunda generación

Tercera generación (1980-1986)

Así, Ford decidió renovar el modelo con la llegada de los 80 y lanzó al mercado la tercera generación. Esta vez, ofrecía de base un motor de seis cilindros en línea de 4,9 litros, aunque era posible optar por un V8, también de 4,9 litros. Siempre estaba la posibilidad de montar un V8 de 5,8 litros, eso sí, porque en EE.UU. siempre se puede ir a lo grande.

En estos años, Ford decidió exportar su todoterreno, que tuvo una buena aceptación en su país natal. Así, llegó a Australia, donde se ofrecía con motores seis en línea de 4,1 litros y V8 de 5,8 litros del Falcon. 

Ford Bronco tercera generación

Bronco II (1983-1990)

Sí, hubo dos Bronco a la venta simultáneamente en la década de 1980. Si bien el normal era un coche grande y pesado, el Bronco II era mucho más pequeño y manejable. Se basaba en otra plataforma y bajo el capó montaba motores como los Cologne V6 del Capri 2.8 Injection.

Estéticamente también era algo distinto y mostraba un diseño muy similar al de la Ford Ranger de aquellos años. Este Bronco ‘alternativo’ se mantuvo a la venta hasta 1990, cuando fue sustituido por el Explorer. Un dato curioso es que el Bronco II tenía muy poca estabilidad, por lo que era propenso a volcar, algo que también sufrieron las primeras generaciones del Explorer y que le costaron a Ford varios millones en indemnizaciones a los clientes. 

Ford Bronco II

Cuarta generación (1987-1991)

En la segunda mitad de los 80, Ford creó un nuevo Bronco basado en la F-150, lo que solo podía salir bien. El resultado fue un coche más seguro y estable, que tenía un diseño más bien plano, pero que funcionaba como debía.

Podía montar motores de seis y ocho cilindros de 4,9 litros, aunque también se ofrecía un V8 Windsor de 5,8 litros, el más potente. Asimismo, de manera opcional se podía montar la tracción a las cuatro ruedas activada por un botón, transmisión de sobremarcha –consiste en añadir un nuevo tren de engranajes después de las marchas convencionales para que el motor funcione más bajo de revoluciones, reduciendo su desgaste- y frenos antibloqueo que al parecer solo funcionaban en las ruedas traseras.

Ford Bronco cuarta generación

Quinta generación (1992-1996)

Además de ser el coche de la famosa persecución -pero no muy emocionante, todo hay que decirlo, pues circulaban a 56 km/h- de O.J. Simpson en 1994, este fue el Bronco más grande que se había creado.

Tenía un diseño mucho más acorde a la década de los 90, con formas más redondeadas y algo más aerodinámicas. También podía montar el V8 de 5,8 litros, aunque el coche en sí no era una opción tan buena respecto de otros modelos. 

En cualquier caso, su fama siempre se deberá a aquella persecución, la más mediática de los Estados Unidos. Unos 95 millones de personas siguieron aquel momento por televisión, que terminó con la rendición del exjugador de fútbol americano. El coche en cuestión, propiedad entonces de su amigo Al Cowlings, se encuentra en el Alcatraz Crime Museum de Tennesee.

Ford Bronco cuarta generación

Sexta generación (2020)

Ahora, Ford ha recuperado este modelo con un aspecto que recuerda claramente al Bronco original, aunque sea más grande. Ofrece una interesante variedad de opciones de carrocería y de configuración, por lo que tiene algo que ofrecer para todos los gustos. Veremos si es aceptado por el mercado estadounidense, aunque es innegable que ha generado una gran expectación desde que fue presentado.

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