El coche conectado es una realidad y, de hecho, los compradores de vehículos nuevos valoran bastante los sistemas de conectividad que ofrecen los modelos (con que sistemas, alámbrico o inalámbrico, etc.). Sin embargo, a la hora de vender tu coche, hay que tener cuidado con cómo has usado Android Auto (o Apple CarPlay).

Lo más normal es que si tu vehículo dispone de esta posibilidad, hayas conectado uno o más dispositivos a él a lo largo del tiempo que lo hayas tenido. Ahora bien, cuando vaya a cambiar de manos debes prestar atención a ciertos detalles por cuestiones de privacidad.

Al conectar tu smartphone, estas compartiendo información almacenada en éste con tu automóvil. Por norma general serán datos como tu nombre, número de teléfono, correo electrónico, dirección e historial de ubicaciones.

Solo con eso ya hay información tuya relevante como para que, si cae en malas manos, puedas estar en algún lío. Pero es que además, según la compañía y marca de coche, otros datos como la agenda de contactos o el calendario con tus próximos quehaceres también pueden acabar en el coche, lo que es todavía más peliagudo.

Por eso, a la hora de vender tu coche, conviene que elimines los dispositivos asociados al sistema multimedia. El automóvil podrá recordar unos cuantos y no debería ser difícil encontrar un botón de “borrar dispositivo” mientras “trasteas” por el menudo de dispositivos móviles.

Con eso debería valer, pero, si quieres estar seguro del todo, mira en el manual de usuario el modo de resetear el sistema para que esté completamente de fábrica, lo que debería eliminar de manera definitiva toda información relativa a ti que estuviera almacenada.

Podría parecer un movimiento que haría prácticamente cualquier persona al poner a la venta su coche en segunda mano, pero como apuntan los compañeros de Computer Hoy, según un estudio en el Reino Unido, es todo lo contrario: cuatro de cada cinco conductores no eliminan su información del vehículo antes de venderlo...