Las mujeres en Arabia Saudí podrán conducir desde el 24 de junio

Desmienten la muerte de la activista de Arabia Saudí
Bienvenidos al siglo XXI. Más o menos

El siglo XXI ha llegado un poquito a Arabia Saudí, donde las mujeres van a poder conducir ¡solas! desde el próximo 24 de junio tras décadas de prohibición, por lo que ya solo hay cinco cosas que no pueden hacer: vestirse y maquillarse para estar guapas, tomar decisiones importantes sin el consentimiento de un hombre, interactuar con los hombres en público, nadar, participar libremente en competiciones deportivas y probarse la ropa cuando van de compras (¡!).

Con este decreto, que se aprobó en 2017, Arabia Saudi deja de ser el único país del mundo que no permite a las mujeres conducir. Según el Gobierno saudí, cualquier mujer que tenga 18 años o más va a poder sacarse el carnet de conducir.

Además, se van a abrir cinco autoescuelas para mujeres, aunque las residentes extranjeras que vivan allí y que tengan una licencia internacional, tendrán que seguir un procedimiento administrativo para recibir su carné.

Esta maniobra aperturista que tantísimo ha gustado a los conservadores y clérigos de ese país forma parte de un plan del príncipe Mohammed Bin Salman, la única persona que puede imponerse por encima de los religiosos, que quiere que las mujeres se incorporen en  mayor medida al mercado laboral, y la mejor manera de facilitarles ese proceso es dejándolas conducir solas en su propio coche sin vigilancia masculina.

Mujeres arrestadas por conducir solas

El movimiento para permitir a las mujeres conducir viene de lejos. En 1990, nada menos que 47 mujeres decidieron ponerse al volante de sus coches, algo que les costó la libertad y, en muchos casos, su puesto de trabajo. Aunque quizá más llamativa fue la protesta que protagonizó Manal Al-Sharif, al menos por la repercusión que tuvo, que no solo se atrevió a conducir, sino que además lo subió a redes sociales y a Youtube. 

Al día siguiente fue arrestada y pasó nueve días en prisión. Cuando recobró la libertad, decidió luchar para levantar ese absurdo veto, algo que al final ha conseguido, aunque no está claro si ha sido por sus movimientos... ¡o por puro interés económico!