Si alguna vez te has quedado tirado con el coche, por ejemplo, cuando te quedas sin gasolina, sabrás lo mal que se pasa en esos momentos. También sufres cuando estás en mitad de la nada y piensas cómo y quién podría echarte una mano para sacarte del atolladero... entonces aparece un amable paisano con su coche, todoterreno, tractor, maquinaria pesada de trabajo y se te ilumina la cara pensando que estás a salvo... Tú, puede, tu coche no.

Eso es lo que le pasó al protagonista de este vídeo, un documento gráfico estremecedor que confirma que, a veces, es mejor lo malo sucedido que lo peor por suceder. 

¿Hubiera acabado igual si hubiera sido socorrido por un Lada Niva?

Fíjate en la cadena de despropósitos, iniciado por la nula estabilidad de la máquina en el momento inicial del vídeo. Entonces, en un milagro, no la pierde pero provoca que el coche volcado se suelte y... adiós. Fue un placer haberte conocido.

Lo dicho, si alguna vez necesitas ayuda en carretera, piénsate bien a quién recurrir y pensar si quien acude a rescatarte tiene más peligro que lo que tú mismo estás sufriendo, no sea que vayas a ser tú el que le socorras o acabes diciendo adiós con la manita tu coche.