Esta es la razón por la que Alpina no lanzó su BMW i8

Alpina BMW i8

La vida ya es lo suficientemente complicada por sí misma y ellos lo tuvieron claro... 

Alpina y BMW tienen una relación muy especial. De hecho, su unión nos ha regalado vehículos únicos como el Alpina B3 Touring, el M3 que nunca fue, pero también nos ha dejado con ganas de otros… como es el caso del BMW i8

Coches deportivos

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Los coches deportivos nos hacen soñar despiertos: grandes prestaciones, promesa de sensaciones al volante, de una conducción sin igual. Los hay grandes, pequeños, bonitos, feos, caros y baratos. Pero todos ellos tienen en común una cosa: si merecen la pena, están aquí. ¡Sigue el link!

No, el superdeportivo híbrido de BMW no ha pasado por el taller de Alpina y ellos mismos se han encargado de explicar por qué. Bueno, seamos honestos, sí que lo hizo… pero no como un proyecto definitivo, dejando claro que no era su intención producir ni vender nada parecido. 

Pero, ¿acaso no tendría éxito una variante del BMW i8 más potente desarrollada por Alpina? La idea era reemplazar el motor de tres cilindros y 1.5 litros de origen Mini que trae de fábrica y sustituirlo por un el cuatro cilindros de 2.0 litros del BMW M135i. 

Este, asociado a su vez a los motores eléctricos, conseguía elevar al BMW i8 hasta los 462 CV y 700 Nm de par motor. No tenía mala pinta, ¿verdad? Pues no, pero resulta que Andreas Bovensiepen, jefe de Alpina, ha desvelado en BMW Blog que el asunto no estaba exento de dificultades. 

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En primer lugar, por la refrigeración, ya que necesitaba un aporte extra de frescura que solo podía solventarse añadiendo un intercooler principal más grandes y dos más adicionales en el frontal para enfriar aceite y transmisión. 

Precisamente, el cambio del BMW i8 tampoco le puso las cosas fáciles a Alpina. Se dieron cuenta de que la transmisión automática de seis velocidades estándar del i8 no podía soportar la potencia adicional, lo que lo obligaba a adaptarse a la misma transmisión automática Aisin de ocho velocidades que el M135i. 

El cuatro cilindros de 2.0 litros del BMW M135i fue el elegido para el i8 de Alpina
El cuatro cilindros de 2.0 litros del BMW M135i fue el elegido para el i8 de Alpina

Esta nueva caja de cambios, así como el motor más grande, también requirió que Alpina creara un nuevo subchasis trasero que fuera más fuerte que el estándar. Esto se tradujo en un aumento de peso considerable (100 kg) y pruebas de seguridad adicionales... Demasiados precios extra a pagar. 

Otro gran desafío era el software, que tendría que ser recalibrado debido al cambio de motor... y entonces, después de tantos dolores de cabeza, la empresa decidió que no valía la pena continuar con el proyecto.

Por tanto, aunque nos hubiese gustado verlo en realidad, los expertos hablaron y Alpina se dio cuenta de que quizá el BMW i8 era ya un coche lo suficientemente especial como para hacer tantos cambios. Y ya sabes lo que dicen: "si algo funciona, mejor no tocarlo".