Accidente de un Koenigsegg One:1 en Nürburgring: la marca reconoce un fallo

Tanto va el cántaro a Nürburgring, que al final...

El Infierno Verde es un circuito mágico, que pone a prueba el valor de cualquier conductor y el rendimiento de las mejores máquinas del mundo. Y cuando uno de los elementos de la ecuación falla, ocurren cosas como las del vídeo: un brutal accidente de un Koenigsegg One:1 en Nürburgring. 

¿Tienes 5,3 millones de euros? Entonces este Koenigsegg One:1 puede ser tuyo

Si no conoces al Koenigsegg One:1, déjame que te facilite unos datos: se trata de uno de los coches más brutales del mundo, con una potencia total de 1 megavatio o lo que es lo mismo, 1.360 CV. Y pesa 1.360 kg. Sí, de ahí su nombre de One:1. Su monstruoso motor V8 de cinco litros entrega, además, un par motor de 1.371 Nm a 6.000 rpm -con más de 1000 Nm disponibles desde las 3.000-, que es gestionado mediante una transmisión de doble embrague de siete relaciones. ¿Quieres uno? Si crees que serías capaz de domar a esta bestia, debes preparar los más de cinco millones de euros que se empiezan a pedir por alguna de las exclusivas siete unidades construidas hasta el momento. Pero si quieres alcanzar una velocidad punta estimada de 451 km/h, es lo que hay. 

El Koenigsegg One:1 volverá a Nürburgring

¿Y qué hacía el Koenigsegg One:1 protagonista del brutal accidente en Nürburgring? Pues lo cierto es que, aunque la marca ha negado que se encontrara intentando batir un nuevo récord en el circuito, sí sabemos que el fabricante sueco pretende registrar el mejor tiempo de la pista entre los coches de producción, ahora que las restricciones de velocidad del Infierno Verde han sido retiradas.

Lo que podemos asegurar viendo las imágenes de cómo quedó el coche es que en el momento de la salida de pista despacio, lo que se dice despacio, no iba. Afortunadamente el conductor del vehículo salió ileso -aunque se le trasladó a un centro hospitalario como medida de seguridad- y la unidad número 2 del One:1 -que fue la protagonista del debut del coche en el Goodwood Festival of Speed de 2014- será reconstruida, según ha confirmado Koenigsegg.

La pasión de Koenigsegg por la velocidad está clara, aunque de vez en cuando tengan algún susto en el desarrollo de sus coches, como en el caso que nos ocupa hoy con el brutal accidente del One:1 en Nürburgring. Pero sus trabajadores saben hacer coches tan buenos como rápidos. Aunque, claro, viendo los cochecitos en que se desplazan... 

Análisis del accidente del Koenigsegg One:1 en Nürburgring

El accidente al final ha traído una cosa buena. Más o menos. Se trata de la transparencia de la marca, que ha anunciado todos los detalles del accidente.

Después de muchos análisis, han llegado a la conclusión de que fue por un fallo en uno de los sensores ABS. Por lo visto, el eje delantero se bloqueó a 170 km/h, por lo que mandó el coche a las protecciones a unos 112 por hora.

La fuerza del impacto del Koenigsegg fue bastante fuerte, ya que el One:1 salió disparado 22 metros girando 180 grados en el aire. Un caro, violento y peligroso tirabuzón que le llevó a aterrizar sobre su rueda trasera izquierda.

Una vez en el suelo, hubo un pequeño incendio en la trasera porque los paneles de fibra entraron en contacto con el escape, que iba calentito. ¿Y quién lo apagó, un bombero? No, el propio piloto, que llevaba un extintor a mano, como mandan las normas.

Si quieres más datos, te dejo lo que dice la marca acerca del accidente de su Koenigsegg One:1 accidentado en Nürburgring:

“El análisis de los datos muestra que el piloto del ABS en el cuadro de instrumentos se encendió cuando ocurrió el error. Esta lucecita está localizada en el centro de los relojes, pero puede ser difícil de ver para el piloto si lleva un casco y además está concentrado en ir a toda velocidad por el Infierno Verde. Tampoco tiene por qué notar ninguna diferencia en el funcionamiento del freno, puesto que va lejos de la zona en la que entra el ABS. Es decir, no tuvo que frenar tan fuerte como para que entrara en antibloqueo.

El aviso de que falla el ABS en el Koenigsseg One:1

Mientras que el aviso del ABS se activó antes del bloqueo del eje, los análisis demuestran que la frenada en Fuchsöhre es la primera en la que hubiera entrado el ABS. O sea, que fue la primera oportunidad del piloto para darse cuenta de que algo iba mal.

Nuestro sistema antibloqueo, como la mayoría, tienen una funcionalidad por la que las ruedas traseras pueden seguir rotando si se llegan a bloquear las delanteras, con lo que se consigue que el coche no haga un trompo. Todo funcionó como debía, como se puede ver por la marca recta de neumáticos que se quedó en el asfalto”.

Después del accidente, los ingenieros se pusieron manos a la obra con la investigación. Intentaron replicar el accidente en su pista de pruebas con otro coche y al final encontraron la solución al misterio.

Los ingenieros, reconstruyendo el coche tras el accidente en Nürburgring del One:1

Sin embargo, el golpe no ha sido terminal para el One:1. Según estás leyendo cómodamente esto en tu velero de lujo, este modelo, uno de los siete que se han fabricado, está siendo reconstruido, ya que el monocasco de carbono sigue intacto, como también lo está el motor, la caja de cambios y diversos sistemas. Es más, incluso las puertas funcionaban y el techo estaba intacto y alineado...

Por cierto, venga hablar del accidente del Koenigsegg One:1 en Nürburgring y no decimos nada del piloto. Pues bien, está sano y salvo y, ojo, sin ningún rasguño. Al menos que se vea. Porque darse un lechón a esa velocidad igual hasta te convierte en partidario de los 110 en autopista...