Por qué la madera podría volver a las carrocerías en el futuro

Coches con carrocería de madera
¿Cambiarías las inserciones en fibra de carbono por un trozo de árbol?

Atención: dentro de poco podrías estar viendo de nuevo madera en las carrocerías de los coches. Lo explican los chicos de Carbuzz, quienes hablan de este material en el que, quizá, nunca habías pensado para reducir el peso de un vehículo.

Suele estar presente en los interiores. Bueno, vamos a hacer una aclaración: digamos que no son, precisamente, esas tiras de plástico que intentan imitar el veteado de un árbol muerto. Para encontrar este elemento, y no un símil teñido en marrón, debes ir a los modelos de lujo (algunos de los que más nos gustan por aquí). Los mismos que, normalmente, no se preocupan por ahorrar kilos en la báscula.

A-co-**-nan-te: así pinta Bentley el Roque Bentayga con madera.

Sin embargo, el diario Japan Times señala que investigadores de la isla están buscando un uso para este material más allá del decorativo. De hecho, quieren sustituir componentes más pesados, como el acero. Parece un paso atrás, ya que en nuestra cabeza aparecen los míticos ‘woodies’ americanos, pero hay un truco: se trata de romper las fibras de la pulpa de madera en fragmentos que miden apenas una centésima de micra, con el fin de hacer nanofibras de celulosa. Mientras eso ocurre, dichas fibras se amasan en plástico para formar un elemento que pesa cinco veces menos que el acero y es cinco veces más fuerte. Imagina los beneficios…

Ahora mismo, un kilo de este material cuesta unos 7,80 euros. El jefe del proyecto, Hiroaki Yano, de la Universidad de Kyoto, espera que este importe pueda reducirse a la mitad en 2030, lo que lo haría competitivo contra el acero (que supone unos 1,70 euros por kilo). Esto reduciría el uso de ‘ingredientes’ como la fibra de carbono (85 euros por kilo), si bien los expertos creen que su precio bajará a 8,5 euros/kg antes de 2025. Veremos…