Si siempre has soñado con conducir a toda velocidad por una autopista, debes saber que tienes unos sueños muy extraños. Pero como de todo tiene que haber en el mundo, nos hemos puesto manos a la obra para que no te lleves una decepción la primera vez que viajes a Alemania: las 5 razones por las que odiarás la Autobahn . Deja de mirarnos así.
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Vale, es posible que el mito de las carreteras alemanas sin límite de velocidad hayan alimentado tu imaginación durante años... y que nosotros mismos hayamos contribuido a ello mostrándote el vídeo del Alfa Romeo Giulia QV a 300 km/h en la Autobahn o la prueba del Porsche Panamera Turbo 2016 . Por eso hoy hemos decidido darte una pequeña ración de realidad para evitar que te pases la semana de vacaciones con tu familia allí de morros. Míralo por el lado bueno: puedes aprovechar para visitar los museos Mercedes y Porsche en Stuttgart ... o dar un paseo por el circuito de Nürburgring . Agentes de viajes nos tendríamos que haber hecho.
No lo pienses más y descubre las razones por las que odiarás la Autobahn en la galería superior... mientras vas dándole vueltas a cuál de los coches para reinar en ella . Lo sé, es algo contradictorio. Como la vida misma. De nada por ahorrarte el disgusto, ¿eh?
El circuito de Nürburgring fue construido entre 1925 y 1927. Gracias al trabajo de más de 3.000 hombres, se pudo llevar a cabo una importantísima obra que tenía como principal objetivo el saneamiento económico de una de las zonas más deprimidas de Alemania después de la Primera Guerra Mundial.
Inicialmente el circuito estaba dividido en tres trazados completamente independientes: El anillo norte (Nordschleife) de 22,81 kilómetros, el anillo sur (Südschleife) de 7,45 kilómetros y un óvalo de 2,24 kilómetros. El único que ha sobrevivido hasta nuestros días ha sido el anillo norte, mientras que de los otros dos circuitos sólo se conservan algunas secciones.
Situado en medio de las montañas de Eifel, el Circuito de Nürburgring es sin lugar a dudas la atracción principal de toda la región de Renania-Palatinado. Aficionados de todos los lugares del mundo se congregan en este templo del automovilismo para disfrutar con las carreras que aquí se disputan o mejor aún, rodar ellos mismos en el mítico trazado.
La primera carrera celebrada tras la inauguración del circuito fue ganada por el famoso piloto Rudolf Caracciola, que inmediatamente después de bajar del coche definió el circuito como "la monataña rusa más peligrosa del mundo".
Hasta el cese temporal de las carreras debido a la Segunda Guerra Mundial, los mejores pilotos del momento como Bernd Rosemeyer, Tazio Nuvolari o el mismo Caracciola lucharon por la victoria en un circuito cuyo estatus de mito no hacía sino crecer.
No fue hasta 1947, tras el final de la Segunda Guerra Mundial, cuando se retomó la actividad en el circuito.
Fue en 1951 cuando Nürburgring acogió su primer Gran Premio de la Fórmula 1. Esta vez los pilotos eran otros: Ascari, Fangio, Moss, Clark, Surtees, Stewart o Ickx eran algunos de ellos, casi nada. De hecho fue Jackie Stewart quien en 1967 apodaría al circuito como "el infierno verde", en referencia a los bosques que rodean al que ya era considerado como uno de los circuitos más complejos, rápidos y peligrosos del mundo.
A finales de los años 60, el 'Nordschleife' y otros circuitos empezaron a resultar demasiado peligrosos para las últimas generaciones de coches de la Fórmula 1. A pesar de la introducción de numerosas medidas de seguridad, en 1976 propiciado en parte por el fatal accidente de Niki Lauda, la Fórmula 1 desaparecería del calendario de la categoría reina.
Para ello, en 1984 se construye el trazado de Gran Premio de 4,54 kilómetros que sí cumple con la normativa de la FIA para carreras de la Fórmula 1. Desde entonces se han vuelto a celebrar carreras de F1 aquí. Como Gran Premio de Europa, Fernando Alonso ganó la última carrera que se disputó aquí con esa denominación en el año 2007.
Como Gran Premio de Alemania, se alterna cada año con el trazado de Hockenheim y el último en ganar aquí fue Rosberg en el 2014. En 2015 no hubo carrera en Alemania y este año ha tocado en Hockenheim de nuevo. Para el calendario de 2017 es una incógnita aún, pero se especula con que se vuelva a correr en Hockenheim aunque le tocara a Nürburgring.
A principios de los 80 los '1000 kilómetros de Nürburgring' donde corrían los famosos Grupo C era la prueba estrella del calendario. Entre los logros más destacados de la época figura la vuelta más rápida jamás completada al 'Nordschleife', con un tiempo de 6 minutos y 11 segundos, a manos de Stefan Bellof en un Porsche 956 C de 620 CV y 840 kilos de peso allá por el año 1983.
A pesar de la existencia del moderno Circuito de GP, la actividad en el circuito fue muy intensa hasta mediados de los 90, en los que el 'Nordschleife' fue testigo de duelos históricos del DTM alemán, como los que se producían entre los Mercedes 190 EVOII, los Alfa 155 Ti y los BMW M3 E30.
La más destacable de las competiciones que se disputan hoy en día son las 24 Horas de Nürburgring, evento que se celebra desde 1970 y que congrega a casi 200 coches participando a la vez.
Otra de las principales actividades para las que se utiliza el circuito es para la puesta a punto de vehículos deportivos, pues la gran variedad de curvas, subidas, bajadas e incluso saltos hacen del trazado el escenario ideal para las exigentes pruebas antes de que un coche se venda al público.
Tal es su caché que numerosas marcas y equipos de carreras tienen allí sus centros de desarrollo. Entre ellas, BMW M.