Mercedes-Benz Clase E Estate: un maletero de locos

Para los amantes del espacio... y los viajes.

¿Qué es esto?

Se trata del Mercedes Clase E Estate, la versión familiar del... 

Espera. Hace poco habéis probado el mismo coche. ¿Se puede saber qué clase de broma es ésta?

Tranquilos todos, que sabemos que es viernes y andáis nerviosos. El coche que probamos hace unos días era el Mercedes-AMG E43 Estate, la versión más radical -por el momento- de la vertiente familiar del Clase E. En la prueba de hoy vamos a hablar del resto de la gama. 

Ah, vale. Cuéntame más...

Como es lógico, está basado en Clase E normal -es decir, su versión de cuatro puertas-, con el que comparte motores, tecnologías y acabados. En España estará disponible -al menos por ahora- con dos versiones de gasolina denominadas E 200 y E 250 -alimentadas respectivamente por un bloque de dos litros que entrega 184 y 211 CV- y otra diésel E 220d propulsada por un motor de 194 CV. Los precios del Clase E familiar parten de 54.803 y 57.200 euros para las primeras y de 55.951 para la de gasóleo. Todos ellos asociados a la caja automática de nueve relaciones 9G-Tronic. 

Háblame del maletero...

Es grande. Muy grande. Grande, de verdad. Tiene una capacidad de 640 litros que puede verse incrementada hasta los 1.820 si abates la segunda fila de asientos. Y con un peso máximo de carga de 750 kg. Eso son muchos muebles de IKEA. Montados. Y además hay bastantes huecos portaobjetos repartidos por el habitáculo, así que el Mercedes-Benz Clase E Estate además de muy grande, elegante, caro y muy grande, es práctico. Y grande. 

¿Y para viajar delante?

Un Mercedes Clase E familiar es tan bueno como siempre. La calidad percibida es brutal en cada centímetro cuadrado de su superficie, y la carga tecnológica disponible es sobresaliente, como en todo Mercedes que se precie. ¿Creías que las pantallas táctiles eran lo más? Su volante incorpora botones táctiles también. No son demasiado intuitivos al principio, pero vas a vacilar a todo el mundo. 

¿Qué hay de los motores?

Hablando de motores... Mercedes-AMG GT Roadster

Hasta poder contar con una gama algo más amplia -se espera que aparezcan versiones E 350d y E63 AMG-, lo cierto es que la versión más interesante es el Clase E 220d, que cuenta con un bloque de dos litros diésel y cuatro cilindros capaz de entregar a su afortunado conductor 194 CV y 400 Nm de par máximo. Vale, no es una bestia salvaje, pero para un uso racional del coche cumple más que de sobra: su consumo medio es de 4,3 litros cada 100 km y sólo emite 112 gramos de CO2 a la atmósfera. ¿Quieres prestaciones? 0 a 100 km/h en 7,7 segundos y 235 de velocidad punta. 

¿Puedo esperar de él un comportamiento como el de un BMW Serie 5?

No. El nuevo Mercedes Clase E Estate -y la versión sedán también- ha avanzado mucho con respecto a las anteriores generaciones en cuanto a su comportamiento dinámico, pero no deja de ser un coche pensado para viajar cómodamente sin exigirle demasiado al afrontar una carretera revirada. Hazlo, y pronto empezarás a ser consciente de lo cerca que anda el conjunto de las dos toneladas de peso. Y ya te avisamos de que no es el mejor modo de hacerlo. 

Vale, pues dime precios. 

Algo más pequeño, pero también bastante grande: Mercedes-AMG C43 Estate

Ya te los he puesto arriba, pero como entiendo que te falte concentración por ser el día que es, te los volveré a contar: la versión de acceso al Mercedes Clase E Estate es la E 200 y cuesta 54.803 euros. La siguiente en la línea es la E 220d, alimentada por gasóleo y con un precio de 55.951 €. Si quieres algo más, puedes hacerte con la E 250, que cuesta 57.200 o tirar la casa por la ventana y lanzarte a por el E43 AMG, cuyo precio aún no está disponible pero que presumiblemente estará más cerca de los 90.000 euros que de los 3.000 que me costó mi anterior Honda Civic de segunda mano. 

Y si quieres algo más... espera al E63. Pero es un secreto. Pero no se lo digas a tu cuñado... 

Texto: Tom Harrison