6 rarezas japonesas deportivas

Mitsubishi FTO

Algunos no llegaron a nuestras carreteras

Los coches japoneses son de sobra conocidos, pero hay algunos que no han cosechado tanta fama como los grandes modelos. Hay muchos que podríamos mencionar, pero hoy solo hablaremos de unos pocos. Estos son 6 rarezas japonesas deportivas.

Algunos de estos modelos son más conocidos que otros, ya que no todos sobrepasaron las fronteras del país del sol naciente. Aun así, aunque su fama sea dispar y su estilo sea muy diferente, todos tienen algo en común: intentaron ofrecer la máxima deportividad y emoción al volante.

Daihatsu Charade GTti (1987)

Daihatsu Charade GTti (1987)

No, no siempre que hablamos de deportivos provenientes de Japón tenemos que referirnos a modelos con grandes motores y sorprendentes cifras de potencia. Daihatsu se dedica principalmente a fabricar coches pequeños de varios segmentos, pero también quiso darle un toque emocionante a una de sus creaciones en los 80.

El Charade GTti era un utilitario con un motor de 3 cilindros -sí, entonces estos bloques no iban más allá de los coches pequeños-, pero contaba con unos 105 CV. Esto, en un modelo de su tamaño, solo significaba una cosa: diversión sin límites.

Nissan Sunny GTi-R (1990)

Nissan Sunny GTi-R (1990)

En los años 90, Nissan ofrecía una nueva generación de su Sunny -también conocido como Pulsar-, un compacto que estaba llamado a ser un superventas. Tenía un diseño moderno y una calidad razonable, por lo que podía ser una elección sensata.

Eso sí, también tuvo un lado radical. Se llamó Nissan Sunny GTi-R y era mucho más sorprendente que lo que podía dejar intuir su estética. Con 230 CV y tracción a las cuatro ruedas, era un gran compacto deportivo que no tuvo la atención que merecía.

Toyota Celica GT-Four (1989)

Toyota Celica GT-Four

El Celica es uno de los grandes coches de Toyota. Se ofreció durante años en distintas versiones y todas tenían un claro estilo deportivo, aunque no siempre la mecánica fuese acorde con él. No es el caso de esta versión, eso sí.

El GT-Four es el gran deseado para los amantes de este modelo. Con tracción a las cuatro ruedas y un motor de 4 cilindros y 2 litros con turbo que entregaba 190 CV, la primera generación con esta denominación es muy especial. Era el buque insignia y el coche que acompañó a Carlos Sainz en su primer mundial de rallies.

Mitsubishi 3000GT (1990)

Mitsubishi 3000GT

Elementos como los alerones que se despliegan a partir de una determinada velocidad son algo relativamente normal en la actualidad, pero no son algo nuevo. Ya en los 90, el Mitsubishi 3000GT contaba con aerodinámica activa, lo cual era una revolución en ese momento.

No era esta su única cualidad, eso sí. El de la firma de los tres diamantes también tenía sistemas como el de las cuatro ruedas direccionales, lo que lo convertía en un coche realmente rápido al unirse a elementos como su tracción total. Llegó a contar con más de 300 CV y fue uno de los coches más avanzados de los 90, así como uno muy sorprendente hoy en día.

Mitsubishi Minica Dangan (1992)

Mitsubishi Minica Dangan (1992)

Probablemente, uno de los coches más desconocidos de esta lista de rarezas japonesas deportivas. Los denominados kei cars son diminutos modelos pensados para las ciudades, pero eso no quiere decir que no puedan tener un toque emocionante, ¿verdad?

A pesar de su simpática apariencia, el Mitsubishi Minica Dangan tenía un motor de 3 cilindros turbo con 660cc, además de un sistema de tracción a las cuatro ruedas. No ibas a ganar una carrera de cuarto de milla en él, pero ten por seguro que serías capaz de volar entre las estrechas calles del casco antiguo de tu ciudad.

Mitsubishi FTO (2000)

Mitsubishi FTO

Si te hablamos de un deportivo noventero de Mitsubishi con tracción delantera, puede que pienses en el Eclipse. Sin embargo, hubo otro muy interesante. El FTO contaba con un diseño atractivo y prometía un buen rendimiento, con un V6 de 2 litros con hasta 200 CV entre sus mecánicas. Aun así, no fue muy popular, ya que se vendió solo en un puñado de países fuera de Japón. 

Al menos, no pasó del todo desapercibido, eso sí. Estuvo presente en varias entregas de la saga de videojuegos ‘Gran Turismo’ y protagonizó una entretenida persecución con un Nissan Skyline GT-R (R32) en la película de 1995 ‘Thunderbolt’, de Jackie Chan. Algo es algo…