Sí, el Hennessey Venom F5 Coupé es demencial. Y... ¿uno Roadster?

Hennessey Venom F5 Roadster

Victor Delgado

Ya te puedes echar gomina, ya...

El Hennessey Venom F5 Roadster es una locura. ¿O no lo es? Este preparador basado en Norteamerica se encarga de dar vida a los coches deportivos más rápidos que hay sobre cuatro ruedas en la faz de la tierra. Sin ir más lejos, el Venom F5 Coupé, la versión cerrada de lo que podría llegar en formato descapotable, tiene como objetivo principal llegar a los 500 km/h. Ahora bien, ¿una variante sin techo? Suena demasiado bonito para ser verdad…

Hennessey Venom F5 Roadster: ¿locura o realidad?

Cuando está comenzando la producción del coupé, con vistas a ser entregado dentro (todavía) de unos dos años, el fundador y presidente de Hennessey, John Hennessey, ha dejado en el aire la posibilidad de fabricar un Hennessey Venom F5 Roadster. Es decir, un coche con el que poder disfrutar a velocidades completamente demenciales… y sin techo.

Hennessey Venom F5 Roadster trasera

De hecho, la estructura del Venom F5, cuyos encargados de diseñarla fueron los británicos de Delta Motorsport, está pensada para poder ser utilizada tanto por un coupé como por un cabrio. Por lo tanto, si llega el momento en el que la decisión de hacer un F5 Roadster es firme, esto no sería ningún problema.

Tanto es así que los futuros interesados deberían preocuparse más por el hipotético tiempo de espera que por otra cosa. Y es que el Coupé estará en producción hasta 2020, como mínimo. Hennessey se ha comprometido a ello. Sería entonces cuando se pondrían manos a la obra con una variante descapotable.

Un motor que… ¡qué motor!

Desde Hennessey siempre han defendido que su prioridad máxima es la de convertirse en un referente en velocidad en línea recta. Por supuesto, con el propulsor que monta la versión Coupé seguro que también lo conseguiría el Roadster. Y que se pongan a hacer modificaciones mecánicas entre ambas variantes parece poco menos que una quimera.

Hennessey Venom F5 Roadster lateral

Estamos hablando de una bestia. De que el motor del Hennessey Venom F5 es un bloque de gasolina biturbo de 7.4 litros con ocho cilindros en disposición de V. Por mucho que pese, que no lo hace con unos 1.350 kg en la báscula, es imposible que con sus más de 1.600 CV de potencia y de 1.750 Nm de par no sea literalmente una bala.

La potencia se transmite al eje trasero en su totalidad a través de una caja de cambios automática de siete velocidades que, ojo, en opción puede ser manual. Lo dicho, demencial. El resultado de este cóctel de deportividad, potencia y velocidad se traduce, en el Coupé, en una aceleración de 0 a 300 km/h en menos de 10 segundos y en una velocidad punta, sobre el papel, de 500 km/h. Nada más que añadir, señoría.