El último rumor que nos ha llegado a la redacción nos ha provocado un ligero mareo, un malestar e incluso cierto nivel de enfado. Ojo: un Mitsubishi Lancer EVO con motor Renault. Ojo: no digo que Renault no haga buenos motores, pero es como decir que el nuevo Ferrari SF90 Stradale lleva un motor bóxer de seis cilindros de origen Porsche. A ver, un poquito de por favor.

El mundo camina irremediablemente al aburrimiento, con coches cada vez más orientados a la lógica y al ahorro de costes. Se deja de lado la pasionalidad y la diversión, o al menos siempre se busca conseguir el mayor margen de beneficio sin dar rienda a la locura, como sí ocurría en los 80 o en los 90. El Mitsubishi Lancer EVO es un coche que nos apasiona, pero con un sentido detrás. Con una razón de ser.

Intentar aprovechar sinergias, tomadas con pinzas, para crear un 'Frankenstein' solo sirve para tirar a la basura nombres míticos. Lo hemos visto recientemente con el Toyota Supra con alma y corazón alemán. Sin duda, malos tiempos para los amantes de los coches japoneses de altas prestaciones: menos mal que el futuro del Nissan GT-R parece garantizado.

El rumor apunta a que Mitsubishi y Renault podrían estar trabajando en un nuevo Mitsubishi Lancer EVO, con el motor de cuatro cilindros y dos litros del Megane RS, pero potenciado hasta los 350 CV y con la posibilidad de utilizar un sistema micro híbrido de 48 voltios. Esto estaría unido a una transmisión de doble embrague y al avanzado sistema de tracción integral Mitsubishi S-AWC.

Hace tiempo nos contaron que el Mitsubishi Lancer EVO del futuro sería eléctrico y nos echamos al temblar. Ahora nos cuentan que tendrá un motor Renault y no es para nada descartable que cuente también con asistencia eléctrica. Sin duda, el regreso de un mito como el Lancer EVO es una buena noticia, pero espero que por querer ahorrar costes no se carguen una herencia de más de 25 años de pura deportividad y emoción al volante. Solo espero eso.