Sin duda, un coche no es. Brittany Force ha batido el récord de velocidad en una drag race de la categoría Top Fuel Dragster, recorriendo 1.000 pies, 304,8 metros, en 3,659 segundos y superando la línea de meta a una velocidad de 338,17 millas por hora, o lo que es lo mismo, 544 km/h. ¡Qué barbaridad!

Sin duda, las cifras que arrojan estos vehículos son de otro planeta. Y es que son auténticos misiles con ruedas capaces de dejar inconsciente a cualquiera de nosotros. Sin embargo, Britanny Force, una joven de 33 años de edad, ha conseguido batir el récord del mundo de velocidad en 1.000 pies, un récord que hasta ahora ostentaba la leyenda de las drag race Tony Schumacher con 336,57 mph.

En el vídeo que tienes sobre estas líneas se puede ver la potencia bruta y la contundencia de estos vehículos. Con coches así, un Hennessey Resurrection de 1.200 CV parece una mosquita muerta. El récord tuvo lugar durante un campeonato de la NHRA en el circuito de Las Vegas Motor Speedway, la auténtica meca de la velocidad en EEUU.

Y es que probablemente tenga algo que ver con el SEMA Show de Las Vegas que está teniendo lugar esta semana en la ciudad del estado de Nevada. Sin duda, poner dos misiles con ruedas y paracaídas, uno al lado del otro, en una recta de 300 metros y acelerar al fondo para superar los 500 km/h en lo que un tardas en abrir una lata de cerveza, no parece lo más seguro y consciente, pero en eso consisten estas carreras de aceleración. ¡En jugarse la vida en cada metro!

Y es que un fallo a esa velocidad, con un vehículo tan loco, puede tener consecuencias fatales. Afortunadamente, esta vez la carrera salió redonda para Britanny Force, que además de llevarse la victoria en la carrera, consiguió un nuevo récord de velocidad en la categoría Top Fuel. Un registro que ha hecho que su nombre forme ya parte de la historia del motor en EEUU. ¡Qué crack!